Crimen de Lucía: familiares denuncian amenazas y piden custodia
Una segunda marcha silenciosa se realizó frente a la Municipalidad este sábado para reclamar justicia por el crimen de Lucía Pérez. Durante la movilización a la que acudieron miles de personas, los familiares de la joven reclamaron custodia policial debido a amenazas personales y telefónicas que recibieron en las últimas horas.
"Esta convocatoria nos da más fuerzas para seguir adelante. Queremos que esta gente vaya presa de por vida, y tenga doble cadena perpetua. La gente nos manifiesta paz y me siento apoyado", manifestó Guillermo, el padre de Lucía, en diálogo con Radio Mitre.
Por otra parte, destacó las reuniones que mantuvo con Carlos Fernando Arroyo y María Eugenia Vidal. "El Intendente hizo lo que tenia que hacer. Es una persona de valores", comentó, al tiempo que resaltó la importancia de la "lucha contra el narcotráfico de la gobernadora". "Mi hija murió por eso, por toda la droga que hay en la calle", opinó.
Matías, hermano de la joven asesinada, también agradeció el apoyo de la gente. "No tengo palabras. Yo se que no hemos sido los únicos que han pasado por cosas así. Hay mucha gente que pasó por algo similar y hoy viene a apoyarnos, a aportar su granito de arena para se haga justicia por mi hermana", agregó.
"Lo único que pedimos es paz y que no haya banderas políticas. Porque lo que queremos es justicia por lo que paso con mi hermana".
En cuanto a la causa, añadió :"va bien, ya que la policía ha hecho buen trabajo, al igual que la Fiscal", pero de todas maneras, solicitó que "ayuden a la Policía, a la Justicia, a darle todo para que se resuelva". "Si hay algún testigo o que sepa algo, de esta causa o no, que se acerque a declarar", pidió. Asimismo, comentó: "me ha llegado información de que no es la primera vez que hacen algo así".
Finalmente, Matías confesó que tuvieron amenazas, las cuales fueron denunciadas en la Comisaría 5ta. de la ciudad. "Han amenazado a mano armada en mi domicilio, a mi papá. Necesitamos tener custodia. No vamos a parar porque alguien nos apunte con un arma. No tenemos miedo. Han llamado reiteradas veces por teléfono, además. Somos un pueblo, una ciudad, un país, y esto se ha difundido mundialmente".