Operativo Libertad: la banda entregaba dinero para "garantizar protección"
A un día de haber detenido a 14 personas acusadas de integrar una organización criminal dedicada a la venta de estupefacientes en distintas zonas de Mar del Plata y al secuestrar más de 65 kilos de marihuana y casi dos de cocaína, los imputados se negaron a declarar ante el fiscal de la especialidad, Leandro Favaro.
En conferencia de prensa, el investigador dio mayores precisiones de la banda que fue desbaratada en el marco del Operativo Libertad, según el fiscal “una de las causas más importantes desde que se armó esta fiscalía”.
“Ha sido un procedimiento de suma importancia, lo que hemos podido comprobar dentro del año de investigación que se hizo casi toda o el 95% por escuchas telefónicas, es que funcionaba una banda en el barrio libertad principalmente, más allá de los procedimientos que se hicieron en Camet, que se dedicaba a la venta de estupefacientes. La modalidad era que se alquilaba un terreno con un pequeño bunker que tenía un tapial y ahí se vendía estupefacientes día y noche, prácticamente”, señaló el fiscal, en diálogo con Radio Mitre Mar del Plata.
“Se vendía desde las 8 hasta las 0. Había cola de gente comprando estupefacientes, por supuesto eso tenía una protección a través de distintos satélites que ante cualquier avance de la Policía delataban, entonces rápidamente se dispersaban y descartaban los estupefacientes”, indicó Favaro, quien agregó: “Sin embargo, quienes realizaban las ventas no eran los principales investigados, sino los organizadores, que eran quienes distribuían y traían el material. A través de las escuchas pudimos dar con estas personas que eran 9 o 10, todas ellas hoy detenidas”.
Indicó que son “personas con antecedente en esta materia, sobre todo en la violación a la ley de estupefacientes y los datos más salientes: a través de las escuchas, pudimos determinar primero cómo funcionaba la organización, cuáles eran los roles que tenía cada uno, cómo se abonaba por cada día de alquiler ese terreno, y determinamos lugar de almacenamiento, dato muy difícil porque se cuidaban mucho al hablar”.
Según el fiscal, “los que tenían los estupefacientes no tenían nada que ver con la familia ni con la banda que administraba toda la organización, en este caso, estimamos que era alguien que se le daba el dinero para que la tenga y para que la guarde”.
Consultado sobre la presunta complicidad para que actué la organización, respondió: “Hasta hora, puedo decir que hay puntos de venta q no pueden funcionar sin algún tipo de protección, no podemos determinar de quién, ni cómo ni cuándo, si tuviésemos pruebas, naturalmente estarían detenidos”.
“Sin cierta complicidad policial, no estarían vigentes bandas de este tipo. Hay escuchas que las personas imputadas juntan el dinero de las ventas para lograr una protección. Entiendo que podría ser objeto de otra investigación aparte”, añadió.
“Haber desbarato al momento del allanamiento, salió con orden de detención porque habíamos probado el funcionamiento de la banda, el comercio, con lo cual la causa hasta ahí ya estaba cerrada en términos judiciales”, aclaró el fiscal
En tanto, resaltó que no se descarta el posible traspaso de la causa, o de alguna derivación, al fuero federal: “Estamos con una organización que sube unos cuantos escalones, porque las escuchas tenemos q eran parte de ellos quienes salían a buscar a distintos lugares del país y la traían, la inspeccionaban, la ocultaban, la vendían. Estamos analizando también si esto es competencia federal por la cantidad de estupefacientes, eso lo vamos a determinar en estos días con el análisis de toda la documentación que hay”.
“La hipótesis de la investigación era que había una banda organizada se dedicaba al comercio de estupefacientes y administraba ese lugar. Hasta ahí, la competencia es netamente provincial, porque si bien lo hacen distintas personas, la venta, como tenemos probado, era estrictamente al menudeo en ese lugar conocido como "El chapón", de hecho, las cantidades q se vendían eran ínfimas, podemos hablar de casi 0,2 gr de coca o 0,5 gr de mari, muy poca cantidad”, continuó.
“Vamos a analizar si debe seguir en la justicia provincial o pasar a la federal”, concluyó el fiscal.