Intermediación Financiera, desde los “Arbolitos” a los “Panamá Papers”
La causa llamada “Intermediación Financiera”, que investiga una organización acusada por "la venta ilegal de divisas, asociación ilícita y lavado de dinero" proveniente de este u otros delitos, mantiene a 25 procesados, en su mayoría gerentes de las casas de cambio Transcambio y Jonestur. También figuran sujetos que se desempeñaban en “cuevas financieras” y en el rol de “Árbolitos” en vía pública.
Al respecto, en aquella tarde del 19 de septiembre se realizaron casi 50 allanamientos en Mar del Plata y Capital Federal. En esa oportunidad, se secuestraron más de 10 millones de pesos, 25 mil euros, 300 mil dólares y gran cantidad de piezas de oro y siete armas.
A su vez, desde El Marplatense se informó la actualidad de los procesados, quienes apelaron sus procesamientos y los procedimientos que se llevaron a cabo en la causa. Se estima que la Cámara de Apelaciones resuelva las presentaciones en febrero.
Sin embargo, hay más noticias. En diálogo con Radio Mitre Mar del Plata, la fiscal Laura Mazzaferri, a cargo de la causa, dijo: “La investigación continúa con un ritmo acelerado, es una causa compleja, con muchos temas para investigar”. En tanto, aclaró que el Juzgado, por cuestiones de agenda, prorrogó las declaraciones indagatorias de los procesados.
La magistrada indicó que los investigados “hacían operaciones financieras marginales, por fuera del mercado formal de divisas”.
Consultada acerca de cómo actuaba la organización y sobre qué significa “Intermediación Financiera”, respondió: “El delito de Intermediación Financiera es cuando alguna entidad funciona, como si fuese un banco, pero sin el permiso del Banco Central. Hacían varias operaciones como descuentos de cheques, préstamos y sin autorización del Banco Central. No había control del Estado. No había prevención, ante el posible lavado de dinero”.
“Son montos millonarios”, resaltó la fiscal, sobre el dinero que manejaban las entidades financieras en sus maniobras presuntamente delictivas. “En estos allanamientos se secuestró material documental e informático, como computadoras, servers y otros dispositivos, donde suponemos que está el contenido de las operaciones que hacían estas personas”, enfatizó Mazzaferri.
Destacó que este caso “podría derivarse en otras causas”. Y, en ese sentido, continuó: “En uno de los allanamientos se secuestraron intercambios entre gerentes imputados en la causa con personas que fueron procesadas y elevadas a juicio en la causa conocida como Carbón Blanco”. “Carbón Blanco” se llamó a una organización criminal dedicada al lavado de activos a través del dinero del narcotráfico, que ha tenido diversos detenidos y condenados en distintos puntos del país.
“Una de las hipótesis es que uno de esos intercambios, donde está gente de Carbón Blanco, se pedía la colocación de divisas en paraísos fiscales. Puede significar una vía a través del cual la organización Carbón Blanco podía intentar lavar dinero o esconderlo en negro proveniente del narcotráfico”, añadió.
Para los investigadores, “existían colocaciones de divisas como en paraísos fiscales como en Andorra”. “Para individualizar cada una de las operaciones, entre ellas la de Andorra, exige el análisis de una por una de la documentación secuestrada y de la apertura de los aparatos informáticos, donde se registraban esas operaciones”, remarcó la fiscal, quien aclaró que estos trabajos “llevan mucho tiempo y recursos”.
Acerca del principado europeo, la hipótesis que obtuvo El Marplatense, a través de fuentes judiciales, es que ha sido un sitio codiciado por los acusados para utilizarlo como un paraíso fiscal, colocando cuentas offshore de aquellas personas que se acercaban a casas de cambio buscando depositar sus ahorros en dólares fuera del país. Los beneficios impositivos de ese lugar eran la condición perfecta. Sin embargo, el cimbronazo económico para Europa no dejó exenta a Andorra, cuyos bancos principales sufrieron un “Corralito”, embargando las cuentas.
Esa situación generó que gerentes de casas de cambio ya nombradas tengan que viajar a Andorra para lograr destrabar ese dinero, en montos millonarios. De hecho, la venta de una de sus reconocidas y céntricas sucursales se habría hecho producto de la necesidad de saldar cuentas con aquellos “damnificados”.
“Sobre Andorra, surgen algunas escuchas donde había algunos de los gerentes de estos grupos económicos que habían viajado para destrabar dinero que estaba depositado ahí. En base a la documentación, la idea es individualizar esas operaciones”, manifestó la fiscal, quien subrayó que también “aparecen cuentas en Panamá, un banco de Nueva York, entre otros bancos”.
Consultada sobre sí estas cuentas detectadas podrían estar involucradas con el escándalo de la causa “Panama Paperes”, donde se desbarató una organización internacional que se desempeñaba con operaciones presuntamente ilegales encabezadas líderes mundiales en paraísos fiscales a través de sociedades ‘offshore’, consideró: “No descartó lo de Panamá Papers. Es muy probable”. Acto seguido, deslizó la investigación de un juzgado de la Capital Federal, señalando que se está investigando a las firmas marplatenses.
Desde la Fiscalía Federal N°1, habían señalado que se trataba de una compleja investigación, iniciada por una denuncia de la Procelac y la Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (Procelac).