“Mi show nació en España, pero en Argentina se potencia”
"Muñeca brava" es un espectáculo que surgió de la necesidad de armar un show para presentar en España a los tangos con un toque de humor. Su autora e intérprete, Mirian Penela, lo trae a escena este sábado en La Bodega del Teatro Auditorium, a las 22. “Surgió casi por casualidad, como suceden todas las ideas que funcionan”, relató a El Marplatense la actriz y cantante argentina.
La artista viene desde España con sus tangos y sus mujeres a cuestas. Personajes femeninos de los años 20 y 30 desfilan sobre un escenario de café concert. Monólogos y canciones se van alternando, en esta suerte de stand up musical, para presentar a la "abandonada que vive su tragedia", la que "se queda para vestir santos", la "gorda", la "perdida", la "fea"...
Este espectáculo ha recorrido distintas ciudades de Europa: Madrid (donde fue estrenado), Barcelona, Santander, San Sebastián, Valencia, Las Palmas de Gran Canaria, Bruselas, Roma y Lausana, contando con el auspicio de la Embajada de la República Argentina en España.
Fue programado en actos conmemorativos del Día de la Mujer, contra la Violencia de Género, Festivales de Tango y encuentros de Teatro Alternativo.
“Cuando me fui de Argentina, pensaba que me iban a poner una alfombra roja esperándome, para que fuera a cantar los tangos. Eso no sucedió. Trabajaba en lugares argentinos, que tenían que ver con el folklore. Pero yo quería cantar en un circuito español de música. Y se me hacía cuesta arriba. Hasta que me dijeron que el tango era muy triste y que la gente se quería divertir viendo un show. Me puse a buscar material y encontré tangos divertidos, o al menos que me hacían gracia. Y me di cuenta que hablaban de mujeres, en distintas partes de su vida y visto desde la óptica de los hombres. A todas las reuní en un espectáculo. Y con este formato se me abrieron muchas puertas”, comenta.
-Un espectáculo que nació en España, con música argentina, y ahora lo traés a tu país. ¿Cierra el círculo de alguna manera?
Nació en España, pero en Argentina se potencia, Esto del inconsciente colectivo, lo gestual que no hace falta explicar nada. Porque aunque en España tengamos el mismo idioma, hay que imponer un artista que no se conoce, un género que no es propio, tangos que no son los de Gardel, que son los más conocidos. Eran muchas cosas nuevas para imponer, y por suerte pude porque la estructura es sólida.
-¿Sentís que la visión de la mujer que describís con las canciones ha cambiado en esta época?
Los tangos hablan de una realidad que por suerte ya no es. Pero me encontré con que persisten cosas. Y muchas se han potenciado. Como el tema de la gordura, por ejemplo. El modelo de los últimos tiempos es peor, ya que antes, una curva no estaba tan mal vista. Hablo de una generalidad de lo que se pretendía de una mujer en la sociedad, desde el humor. Son nuestras madres y abuelas que cumplían esos patrones, y no nos queda tan lejos, en realidad. El espectáculo nació de la necesidad de hacer humor. Te deja pensando, analizando cosas. No habla en contra de los hombres, sino a favor de las mujeres. Es una mirada optimista que apuesta a que las cosas sigan cambiando y mejorando para las mujeres, en términos de igualdad, que es en lo que coincidimos todos.
