Ramiro Jorge: “No hay tiempo para lamentarse”
El defensor de Alvarado, Ramiro Jorge, señaló que “no hay tiempo para lamentarse”, luego del empate sin goles de este domingo ante Deportivo Madryn en el Minella, por la segunda fecha de la Zona Campeonato B del Federal A de fútbol. En tal sentido, el ex Unión le dijo a El Marplatense que el plantel ya piensa en el duelo de este miércoles ante Defensores de Belgrano de Villa Ramallo. El “Torito”, que perdió 3 a 1 en la ida, buscará revertir la serie (si gana 2 a 0 pasará por el valor extra del gol de visitante) ante su gente.
Alvarado fue protagonista ante Deportivo Madryn, aunque no pudo quebrar el sistema defensivo de su rival. “Nos quedó una sensación amarga. Desde que empezó fuimos para adelante y jugamos en campo rival. Hicimos todo bien hasta la puerta del área, porque en los últimos 20 metros terminábamos mal las jugadas. Desbordamos mucho pero nos faltó tranquilidad, frialdad y precisión para elegir la mejor opción”, analizó Jorge. “Si hacíamos un gol en el primer tiempo, seguramente terminábamos 3 o 4 goles arriba. También hubo dos jugadas que a mí me parecieron penales y podían haber cambiado el partido”, agregó.
El equipo de Gustavo Noto no pudo festejar en ninguno de los tres partidos oficiales del año, con dos derrotas y un empate. “Tuvimos dos derrotas duras, que no las esperábamos. Pero no podemos pensar drásticamente porque a los pocos días jugamos otra vez. No es el comienzo que esperábamos, pero quedan 6 partidos y queremos estar entre los dos clasificados”, indicó.
Con respecto al duelo ante Defensores de Villa Ramallo, Ramiro Jorge apuntó: “Esperamos ganar el miércoles por dos goles de diferencia para clasificar. Esto es así, no hay tiempo para lamentarse porque jugamos cada tres días”. Asimismo, ante el escenario que se puede presentar el miércoles en el Minella, el zaguero remarcó que “estamos obligados. Ellos van a hacer un partido largo y van a salir de contra. Siempre juegan sin presión, imagínate ahora, con dos goles a favor. Tendremos que ahogarlos, pero sin desesperarnos”.
