El Gobierno convocó de urgencia a la cúpula de la CGT
Con el objetivo de evitar el primer paro general del año, el Gobierno convocó para este jueves al Consejo Directivo de la CGT a la Casa Rosada luego de una intensa jornada con protestas en las calles, un discurso de Hugo Moyano con ultimátum para una medida de fuerza y negociaciones del ministro Jorge Triaca desde Suiza, en la cumbre de la OIT.
Se trata de un movimiento al filo de la confirmación de la convocatoria al paro, se verá si en este caso a tiempo o demasiado tarde, como sucedió en el Congreso con la ley para limitar los aumentos de tarifas.
No será Mauricio Macri el anfitrión de la cúpula de la CGT, adelantaron en la Casa Rosada, sino el coordinador Mario Quintana -forjó vínculos con gremialistas cuando supervisó Trabajo-, Nicolás Dujovne -ministro de Hacienda y desde mayo con esa cartera entre las nueve a su cargo- y Ernesto Leguizamón, jefe de Gabinete del área comandada por Triaca.
Fuentes del Gobierno no descartaron la presencia de Marcos Peña. Por la central obrera estarán los triunviros Juan Carlos Schmid, Carlos Acuña y Héctor Daer, Andrés Rodríguez, José Luis Lingeri y dos del rubro de transportes, determinante para el eventual éxito de una medida de fuerza: el colectivero Roberto Fernández y el maquinista Omar Maturano. Los sindicalistas irán directo de la Casa Rosada a la reunión de Consejo Directivo en Azopardo.
“Queremos bajar la conflictividad y el diálogo está abierto, no hay ninguna guerra”, buscaron descomprimir a media tarde del miércoles desde el Ministerio de Trabajo, y ya asomaba la posibilidad de un llamado a la CGT. Las negociaciones estaban en marcha en Buenos Aires y en Ginebra, luego de que aumentara la tensión.
“El paro no sirve, lo que sirve es el diálogo”, repetían este miércoles los negociadores de parte del Gobierno. Esta vez la estrategia de aislar a Hugo y Pablo Moyano no alcanzaba para desactivar o debilitar la medida de fuerza. Como con la ley de tarifas, no se cristalizaba la división que buscó potenciar la Casa Rosada entre opositores y “racionales”, destalló Clarín.