Científicos marplatenses desarrollaron nuevos tratamientos para enfermedades hepáticas crónicas
Científicos marplatenses desarrollaron una patente, en proceso de aprobación, que involucra receptores celulares, con potencial para el tratamiento y/o diagnóstico de enfermedades como el cáncer. Además, el descubrimiento permitiría entender los efectos de la malnutrición proteica sobre la función hepática y endócrina.
Investigadores del grupo “Enfermedades metabólicas”, dirigido por Andrea Chisari, investigadora adjunta del CONICET y Profesora de Fisiología Humana de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la Universidad nacional de Mar del Plata (UNMDP), llevan adelante el desarrollo de una patente que permitiría diagnosticar y tratar patologías hepáticas crónicas que afectan a una gran parte de la población mundial. El hallazgo científico consiste en tres partes: la generación un receptor celular (TGFBR2-SE), la síntesis de una proteína recombinante de unión a dicho receptor y la producción de un anticuerpo monoclonal que lo detecta. Por supuesto, el receptor tiene un papel central en la regulación de la fisiología y patología hepática, por lo que tendría un enorme potencial sanitario y comercial.
Recientemente en nuestro país se descubrió una nueva variante de esta proteína, que fue denominada TGFBR2-SE. La presencia de esta proteína recombinante “competiría” con los mensajeros clásicos de esta vía de señalización, así “el TGFBR2-SE podría cumplir un rol regulatorio contrarrestando los efectos adversos de la activación de esta vía, que se encuentra aumentada en enfermedades crónicas del hígado, tales como el hígado graso no alcohólico y el cáncer de hígado”, explica Chisari.
Estos avances tendrían un claro potencial en el tratamiento y diagnóstico de cáncer de riñón, piel, hígado, fibrosis de pulmón, cirrosis, enfermedades metabólicas y musculo-esqueléticas como la artrosis, osteoporosis, artritis, entre otras. La investigadora explica: “actualmente nos encontramos trabajando en instrumentos biotecnológicos para una mejor aplicación del hallazgo y en estudios en artritis reumatoidea y fibrosis hepática”.
El descubrimiento de estos receptores solubles y su potencial aplicación como agentes terapéuticos implicaría una serie de ventajas, dada la alta especificidad y afinidad de éstos y la baja respuesta del sistema inmune a este tipo de agentes. Si bien el proyecto se encuentra en fase preclínica y no han llegado a pruebas en pacientes aún, los resultados serían de especial importancia para aquellas personas afectadas por la malnutrición proteica crónica a nivel mundial. Además, permitiría establecer asociaciones entre alteraciones metabólicas hepáticas inducidas por malnutrición proteica crónica, o por respuesta inmunológica local, así como por lesiones neoplásicas en el hígado adulto. Sin dudas, un avance científico con un futuro prometedor para la salud humana.