La salud de Thiago Joel: "No es nada fácil ver sufrir a un hijo por otra persona"
El 29 de marzo de 2014, cambió la vida de Thiago Joel Franco, quien en ese momento tenía 5 años, cuando Eduardo “Lalo” Ramos, a bordo de un Mercedez Benz, embistió desde atrás al Chevrolet Corsa en el que viajaba.
Thiago padece graves secuelas físicas y neurológicas a raíz del siniestro, y su salud presenta constantes complicaciones, como en los últimos días donde un cuadro viral complicó su difícil situación, en el día a día, debido a las crisis convulsivas que sufre.
"Comenzamos el día martes con crisis convulsiva, ya que estaba incubando una varicela. Debido a su complejidad clínica a causa de las lesiones neurológicas que le quedaron, dentro de su secuela, está la epilepsia con la cual también veníamos con problemas desde el mes de julio, donde lo tuvimos que internar en un primer momento en la Clínica del Niño, para luego ser derivado en ambulancia al Fleming", señaló Rocío Dusek, mamá de Thiago, en diálogo con el programa "Antes que sea Tarde" por Radio Mitre Mar del Plata.
"En el mes de septiembre estuvimos en el Fleming de Escobar, donde se le hizo toda una evaluación para ver en que lugar estamos posicionados, con respecto a las pruebas que se le hicieron el año pasado, donde se detectó un retroceso muy importante, a causa de las crisis que tuvo en el mes de julio", remarcó Rocío.
"Hasta la madrugada del pasado domingo estuvo con crisis convulsivas, por no poder tolerar bien su medicación, debido a que tenia la boca con muchas llagas por la varicela y se le hacía imposible poder tragar sus comprimidos como los toma habitualmente. A esto se le sumó que se la había elevado la frecuencia cardíaca, por tantas crisis convulsivas y recién ahora está estable, pero debemos esperar que pase todo el proceso de la varicela, que por su situación se hace mas prolongada de lo normal", aseguró.
"Es imposible no sentir impotencia, porque a medida de que van pasando los años, mi hijo va empeorando, ya que el tipo de lesión neurológica que le quedó, se va complicando con su crecimiento", lamentó la mama de Thiago.
"Uno siente mucha broca e impotencia, porque no es nada fácil ver sufrir a un hijo, por otra persona. Hay que tener una estabilidad y un equilibrio emocional para no desmoronarme y poder mantenerme fuerte para él. Trato de pensar siempre en positivo, pero la verdad es que me cuesta mucho", destacó.
"Gracias a Dios la obra social, mediante un recurso de amparo, hoy día nos está cubriendo toda la atención que necesita Thiago, por lo que solo pedimos apoyo en la oración y agradecimiento a toda la gente que nos ha estado apoyando y acompañando desde un principio" dijo Rocío, mamá de Thiago.