Tras el desborde en Güemes, habrá modificaciones en el servicio de take away
Luego del balance realizado por el intendente Guillermo Montenegro tras la "prueba piloto" con la reapertura de comercios minoristas de bienes no esenciales y peluquerías, el jefe de gabinete municipal, Alejandro Rabinovich, destacó en declaraciones a CNN Radio Argentina, el trabajo realizado por todos los comerciantes con el cumplimiento de los protocolos sanitarios para la reapertura y, al mismo tiempo, reprochó el comportamiento social de "un grupo de personas que no entendió el objetivo de esta iniciativa y fue a pasear por la calle Güemes".
“La prueba piloto, en cuanto al funcionamiento de los comercios y el cumplimiento de los protocolos como el doble trapo, uso del barbijo, clausura de probadores, funcionó en forma perfecta”, manifestó Rabinovich.
Seguidamente, el funcionario remarcó: “Durante el sábado y el domingo hicimos una doble prueba: el funcionamiento de los protocolos en los comercios y el comportamiento social. Sobre este último punto, el sábado funcionó en forma extraordinaria, durante el domingo bien hasta las dos últimas horas en seis cuadras de la calle Güemes donde hubo mucha gente que se volcó a la calle sin cumplir la cuarentena. Fueron en grupos familiares enteros a tomar helado, de paseo, a hacer picnic. En estas seis cuadras de la calle Güemes se produjo el no respeto a lo que nosotros habíamos indicado”.
En este contexto, el jefe de gabinete municipal añadió que “estamos esperando que Presidencia de la Nación apruebe el protocolo, tomamos nota de algunas de las cuestiones que sucedieron durante la apertura de los comercios minoristas y el comportamiento social. Habrá modificaciones relacionadas con el take away, comprar para comer en sus casas y no en el espacio público, se clausurarán todos los lugares para sentarse y se modificarán horarios de atención. Vimos que el comportamiento social, en ese sector de la ciudad, no estuvo a la altura de lo que estamos pidiendo y de la cuarentena”.
Por último, Rabinovich remarcó que “los comerciantes cumplieron con todo. Nosotros relevamos unos 200 comercios de la ciudad y no hubo uno que haya fallado. El comportamiento del protocolo en sí fue perfecto. Y mucha gente también, como los que se quedaron en sus casas, pero hubo un solo grupo que no entendió nada. La síntesis de esto es la foto de las personas tomando helado en la calle. Nosotros, la semana previa estuvimos explicando los protocolos, cómo iba a funcionar y diciendo que la cuarentena seguía vigente”.