Un grupo de personas representantes de Academias de Conducir reclamaron en la mañana de este martes en la sede del COM que los dejen trabajar. Aseguran que presentaron un protocolo y que no han tenido respuestas.
A pura bocina, los trabajadores marplatenses se sienten "discriminados" por el municipio e hicieron escuchar su bronca colocando más de 25 autos en las puertas de donde funciona el despacho de Guillermo Montenegro.
Federico Leonetti, uno de los referentes, señaló que "hace más de 70 días que no podemos trabajar y el municipio nos dice que no tienen autorización para habilitarnos".
En el protocolo presentado, las Academias de Conducir incluyeron como medida de prevención, una mampara ubicada entre las dos butacas delanteras del auto. "Buscamos aislar una persona de otra, con cortinas. Separar más las clases para que la gente no se amontone. Higienizar el auto constantemente", detalló.
"Queremos resaltar que no tenemos diferencia con otros rubros que tienen permiso. A diferencia de un peluquero que tiene que tocarte el pelo nosotros tenemos doble comando de pedales, tenemos identificados a nuestros clientes. No hay acercamiento", remarcó luego.
Para los trabajadores de Academías de Conducir, "hace más de un mes y medio hablamos con el representante de transporte luego con Fernando Muro y la respuesta es la misma: provincia o nación no dan respuesta y mientras tanto tenemos más de 70 familias que no tienen un peso, ni Take Away ni nada".
En caso de no tener respuestas en el breve plazo, comentaron que "seguiremos reclamando todos los días. Los intructores cobran por clase, como un taxista por un viaje. Si no hay trabajo la situación es alarmante", denunciaron.