Muchos quieren ser influencers pero sólo el 4% lo logra
De las miles de millones de personas que usan redes sociales en el mundo, hay un puñado (cada vez más grande, por cierto) que lo hace en forma asidua con la ambición de convertirse en influencer, una actividad que para algunos puede ser muy redituable. Sin embargo, un informe recientemente divulgado revela que sólo un grupo selecto consigue que esa actividad sea su sustento.
Es cierto que plataformas como YouTube, Instagram, Twitch y Tiktok, entre otras, son trampolines hacia la fama de algunos usuarios ingeniosos, que tienen algo interesante para mostrar. En el mundillo digital la lógica es más o menos clara: cuantos más seguidores, mayores son las posibilidades de obtener ganancias. Las fuentes son variadas y cambian según la red social y el afortunado influencer: acuerdos con marcas, reparto de ingresos publicitarios, suscripciones a canales, contenido patrocinado, sponsors dispuestos a invertir, incluso donaciones y venta de mechandising.
Ahora bien, tal como señalábamos, conseguir que esa actividad sea realmente redituable no es común. Un estudio de SignalFire nota que en el mundo hay cerca de 50 millones de creadores de contenido para redes sociales, que casi 47 millones lo hace en forma “amateur” y que sólo 2 millones viven gracias a su presencia en Internet.
We just published SignalFire's big Creator Economy report, revealing:
-There now 50M pro or semi-pro creators
-A wave of fintech startups built for them
-The trend of niche creators gaining independence from tech giantshttps://t.co/IZY2iJdGYc pic.twitter.com/s0kai7Y9Fc— Josh Constine -SignalFire (@JoshConstine) September 23, 2020
Eso implica que solamente el 4% de los creadores de contenido en las social media logra que esas acciones se conviertan en un sustento real y en un única actividad laboral.
De acuerdo a los responsables del informe, de aquellas 2 millones de personas (los que consiguieron el “trabajo” que muchos envidian) 1 millón tiene canales de YouTube con más de 10.000 suscriptores, 500.00 se mueven en Instagram con más de 100.000 seguidores, y cerca de 300.000 hace transmisiones en la plataforma de streaming Twitch.
Por su parte, entre el gran volumen de “creadores amateurs” hay 12 millones de usuarios con canales en YouTube con menos de 10.000 seguidores, 30 millones con cuentas en Instagram por debajo de los 100.000 followers y 2.7 millones de streamers en Twitch.
“Más de 50 millones de personas en todo el mundo se consideran creadores, a pesar de que la economía creadora nació hace solo una década”, dicen desde SignalFire y notan que esta actividad “se ha convertido en el tipo de pequeña empresa de más rápido crecimiento”.
La fuente nota las ventajas y desventajas de este negocio en ascenso. Entre las primeras, que una vez que estas plataformas ganan terreno, pueden crecer rápidamente gracias a la viralidad y que hay evidencias de grandes resultados en este espacio. ¿Entre las contras? Dicen que el mercado se encuentra muy saturado y que resulta “difícil para los nuevos participantes ya que los creadores establecidos tienen fuerte influencia en las redes”.
El estudio también preguntó a nenes en Estados Unidos que quieren ser cuando sean grandes. Si bien muchos (11%) respondió como podría haberlo hecho un niño en 1980, mucho antes de la irrupción de las redes sociales, al decir que desean ser astronautas; el 29% compartió el siguiente sueño: ser youtuber.
Fuente: TN