Padre e hijo extorsionaban desde la cárcel: "Es hora de rever si un preso puede tener un celular"
Padre e hijo, detenidos en Unidad Penal 44 de Batán, sumaron una nueva causa por extorsión luego de hacerse pasar por policías y amenazar a un hombre con una investigación por el delito de "grooming" tras remitirle una serie de imágenes y videos de jóvenes desnudas a través de Facebook.
Desde su celda y con dos teléfonos celulares, los delincuentes coordinaban el accionar y pedían importantes sumas de dinero. En las últimas horas, en el marco de la investigación, personal de la SUB DDI Balcarce coordinó el allanamiento de la misma y secuestró los dispositivos.
La causa esta a cargo del fiscal Rodolfo Moure, quien explicó: "Esto se inicia (este lunes) a raíz de una denuncia de una persona de la ciudad de Balcarce, que daba cuenta de que a través de un perfil de Facebook habían entablado una comunicación con él, de parte de una mujer, donde habrían enviado fotografías de menores desnudas".
"La persona bloqueó al usuario y este no pudo contactarse más. Se inició la investigación y se determinó que esta persona habría recibido un llamado de un sujeto de sexo masculino que se identificaba como un comisario de Mar del Plata donde le decía que lo iban a denunciar por grooming a raíz de las fotos", continuó.
Ante esto, la persona hizo la denuncia en la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de Balcarce y se inició el proceso de investigación. Además, se conoció que los delincuentes se comunicaban desde Mar del Plata, puntualmente desde el Penal de Batán, y exigían sumas cercanas a $20 mil para no denunciar a sus víctimas.
En este sentido, Moure sostuvo que fue "después de una triangulación de comunicaciones y un estudio de las antenas de telefonía que se determinó que ese llamado provenía desde una celda la UP N° 44 de Batán".
Posteriormente, este martes, se procedió al allanamiento de la celda, donde "se logró secuestrar dos teléfonos celulares y un chip, el que se utilizó para la extorsión".
"Por el momento, las personas investigadas son padre e hijo, que están cumpliendo condenas por otros hechos. Se ve que aprovechan su tiempo libre para seguir cometiendo delitos. Hoy se les va a sumar una otra causa por extorsión con una pena de cinco a diez años de prisión y estamos investigando si hubo otros casos", sentenció el fiscal esta mañana.
"Es hora de rever si un preso puede tener un celular, hay demostrados ejemplos de que están siendo utilizados para cometer delitos. Desde mi punto de vista, de ninguna manera deberían tener medios de comunicación al exterior sin ser controlados por autoridades del Servicio Penitenciario", concluyó.