Denuncia que su padre está hace más de 24 horas sentado con oxígeno y suero esperando una cama en Mar del Plata
Romina y padre, hipertenso y diabético, padecen de coronavirus. Mientras él lucha por respirar, su hija recorre Mar del Plata en busca de una cama, pero la respuesta en todos lados es la misma: "No hay". Tal es así, que desde este martes a las 11 de la mañana, es decir, desde hace más de 24 horas, están en el Sanatorio Belgrano esperando. Él en silla de ruedas, con oxígeno y suero. Ella muerta de angustia.
Según indicó, la situación no se limita a ese nosocomio, sino que la tensión del sistema sanitario castiga tanto a efectores públicos como privados. Por lo que le dijeron, tampoco hay disponibilidad en la Clínica 25 de Mayo y en el Hospital Interzonal General de Agudos (HIGA) "Dr. Oscar E. Alende" le dijeron que debía esperar en un pasillo.
"Nosotros dimos Covid positivo el miércoles pasado. Mi papá estaba bien y el viernes se empezó a complicar con fiebre, tos y le costaba respirar. Llamé al 107 y, por tener obra social, no nos quisieron mandar una ambulancia a la una de la madrugada. Así que, como vivo a media cuadra de la sala de Batán, fuimos a buscar a un médico. Ahí, nos atendieron muy bien y lo llevaron en ambulancia. Recorrieron dos clínicas y no había camas, y tampoco había en el Regional, donde la única opción era dejarlo en los pasillos y se iba a morir de frío. Nos trajeron de nuevo a casa", contó sobre la travesía que comenzó en Batán y terminó en Mar del Plata.
"Este domingo a la noche, volvió a empeorar. Llamamos a ambulancia, a un médico, todo, y nadie se hizo cargo. Tuvimos que salir en el auto, con Covid, a la Clínica Belgrano. El lunes le hicieron placas y vieron que tenía principio de neumonía, pero no había camas. Estuvieron desde el mediodía hasta las 8 de la noche con suero", explicó en diálogo con CNN Radio Mar del Plata 88.3.
"Los médicos nos dijeron que si este martes seguía igual lo llevemos porque lo internar sí o sí. Ahora, estamos en el Sanatorio Belgrano desde ayer (este martes) a las 11 de la mañana afuera con él sentado en una silla de ruedas, con suero y oxígeno esperando una cama. No sabemos dónde está la cama para mi papá. Estamos a la deriva", concluyó al destacar que ningún tipo de autoridad se comunicó con ella.