Antares y una polémica excepción: rechazan el desembarco de la cervecería en Chapadmalal
Por Carlos Walker
A través de un comunicado titulado “Alerta: políticos municipales proyectan el fin de Chapadmalal”, tal como adelantó este portal de noticias, vecinos y entidades sociales de la zona sur denunciaron que se estaría avanzando en un “monstruoso” negocio inmobiliario en ese sector del distrito de General Pueyrredon.
En un texto presentado este lunes en el Concejo Deliberante, los vecinos explicaron que “en estos días se han dado a conocer diversos proyectos para el Distrito de Chapadmalal, unos apuntan a cambios en el ordenamiento territorial, convirtiendo áreas residenciales en centros comerciales, otros pretenden regularizar, sin resguardos socio ambientales adecuados, la actividad de alojamientos y Cabañas de alquiler, ambos han sido rechazados formalmente”.
A continuación, se remarcó que “rechazo que obtuvo amplia repercusión, sin embargo, existen otros proyectos de menor envergadura pero no por eso dignos de ser pasados por alto: el desembarco de sucursales con franquicias impactando desfavorablemente en las incipientes industrias locales de productos y servicios”.
“Queremos solicitar a nuestras y nuestros ediles, que generen medidas de protección de los puestos de trabajo local y a su vez, un resguardo efectivo para el auge, crecimiento y proyección de las producciones locales en incipiente desarrollo, en su dimensión material y simbólica. Solo se necesita tiempo prudencial para consolidar el crecimiento, así como para estar en condiciones de soportar el repentino interés comercial despertado en inversores que ven a Chapadmalal como un nuevo territorio de conquista”, se resaltó en el documento al cual El Marplatense tuvo acceso.
En ese sentido, se subrayó que “venimos a expresar nuestro rechazo al cambio de uso de suelo para la instalación de nuevos locales de expendio de cerveza provenientes de casas matrices y de centros de producción ajenos al distrito de Chapadmalal, los cuales tienden a monopolizar el mercado, no son expresiones culturales singulares de Chapadmalal, no coparticipan en la generación de trabajo local ni consolidan retornos económicos redistribuíos en el distrito generando una fuga de dinero que entorpece el desarrollo económico y cultural local, a la vez que atomiza las propuestas de producción y consumo originales de la zona”.
DENUNCIAN “ATROPELLO”
“Este distrito cuenta con producción regional propia, caracterizada por tratarse de pequeñas producciones artesanales generadoras de trabajo genuino y producciones que hacen a la singularidad de Chapadmalal, como también sus restaurantes con hortalizas agroecológicas producidas en huertas locales y múltiples factorías familiares de productos y servicios al turismo, consolidando un modelo local que ha tenido el merecido reconocimiento de vecinos y visitantes, dando sostenibilidad e identidad territorial a partir de originales propuestas”, se añadió en el texto rubricado por la Asamblea por los Bienes Comunes de Santa Isabel, Asamblea Luna Roja, Sociedad de Fomento Playa Los Lobos y Observatorio Ciudadano Paseo Costanero Sur.
Y se destacó que “el crecimiento de Chapadmalal fue paulatino y armonioso hasta la llegada de la pandemia y el recibimiento de un turismo que no podía salir del país hacia otros destinos. Esta situación produjo aquello que muchos economistas alertaban, y se generó un boom turístico al sumarse a quienes visitaban Chapadmalal tradicionalmente, nuevos visitantes que ‘descubrieron chapa’ y un fenómeno entre ansiedad y atropello, sobre un hábitat que aún conserva viva su ruralidad y sus prácticas sociales emancipatorias”.
ANTARES EN LA MIRA
A su vez, se puntualizó que “tuvo tratamiento legislativo el día 25 de marzo, un proyecto de ordenanza que pretende modificar el tipo de uso de suelo con miras a la habilitación de una actividad que según el actual Código de Ordenamiento Territorial, no se puede desarrollar en el sitio pretendido”. Se trata del otorgamiento de una excepción en Chapadmalal para la habilitación de una sucursal de una reconocida marca de cerveza artesanal: Antares, de acuerdo a lo expresado por los vecinos a este medio.
En ese contexto, los vecinos indicaron que “venimos a poner en consideración que para nuestra población es deseable cuidar la zona de aquellos cambios bruscos que degraden o modifiquen el actual uso de suelo, todo ello del modo en que se está pretendiendo imponer, de manera inconsulta y sin instancias de participación ciudadana que avale los cambios sustanciales en su propio hábitat, elegido por las actuales condiciones naturales y residenciales tradicionalmente asociadas con el distrito”.
Y propusieron “un desarrollo local autocentrado, que pone en valor los recursos existentes y propone satisfacer las demandas y necesidades de la ciudadanía con estos recursos, en una escala territorial de distrito y barrio, incorporando perspectivas desde un enfoque de transición y procesos dinámicos que exigen políticas de resguardo, crecimiento controlado y sostenido y reglas claras de juego que favorezcan las actividades a largo plazo, dando estabilidad y proyección de futuro a las economías familiares que están creciendo armoniosamente en la zona, sin exigir grandes cambios en los usos de suelo ni amenazando en impactar la actual y paulatina economía en crecimiento del lugar”.
Recalcaron que “para avanzar legislativamente, proponemos un tipo de desarrollo local al cual se le deba acompañar con el reconocimiento de las externalidades que produce, como son sus efectos en la reproducción de la vida y en el entorno ecológico, instaurar normativas tendientes a reducirlas, apostando por la optimización de recursos de las pequeñas empresas con pluralidad de formatos y de proximidad, enraizadas en los barrios y que tengan claros retornos sociales y medioambientales, más allá de la pura ganancia económica. Los distritos que tienen más desarrollo local tienen menos desigualdad, una ciudadanía más sana, más capital social, más diversidad, y sus empresas adquieren un mayor compromiso con el desarrollo de la comunidad”.
“La comunidad de Chapadmalal cree que existen modos de crecimiento y desarrollo capaces de preservar la biodiversidad, la pluralidad cultural y las áreas de alto valor ecosistémico, socialmente justas y con participación de trabajadores de la economía popular, siendo más equitativas que las propuestas por el mero impulso de inversiones privadas atentas a los focos económicos de moda”, añadieron.
Ante este reclamo, los vecinos pidieron que “la implantación de los mecanismos legales, administrativos y económico financieros que doten al gobierno municipal de los medios que posibiliten la eliminación de los excesos especulativos, a fin de asegurar que el proceso de ordenamiento y renovación urbana se lleve a cabo salvaguardando los intereses generales de la comunidad”.
Ademas, solicitaron “posibilitar la participación orgánica de la comunidad en el proceso de ordenamiento territorial, como medio de asegurar que tanto a nivel de la formulación propuesta, como de su realización, se procure satisfacer sus intereses, aspiraciones y necesidades”. Y reclamaron: “Propiciar y estimular la generación de una clara conciencia comunitaria sobre la necesidad vital de la preservación y recuperación de los valores ambientales”.