El domingo recibió la denuncia de un vecino, padre de los dos niños de 11 y 14 años. De acuerdo a su relato, ambos estaban jugando en frente a su vivienda del Barrio Aeroparque.
Después que dio a conocer el dramático hecho, establecieron que Alegre tenía armas de fuego en su poder. Por tal motivo, ordenaron un allanamiento en su domicilio.
La jueza de Garantías 6, Lucrecia Bustos, autorizó el operativo y los policías encontraron al agresor en su casa y le incautaron dos revólveres calibre 32, ambos cargados.
El fiscal Paulo Cubas, quien se encuentra dentro de la Unidad Funcional de Instrucción de Composición Temprana de Conflictos Penales, solicitó el secuestro de las armas e imputó al acusado por “amenazas”.