El fiscal que interviene en el segundo juicio por el caso Lucía Pérez, fallecida en octubre del 2016 en Mar del Plata y por cuya muerte solicitó que uno de los imputados sea condenado a prisión perpetua, señaló que existió una “igualdad ficticia” entre los imputados y la adolescente que derivó “en una situación de abuso y posteriormente en la muerte”, y confía en que el tribunal pueda disponer un veredicto condenatorio si se entienden los hechos “de modo más aggiornado”.
Así lo aseguró en declaraciones a la prensa Leandro Arévalo, titular de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 7 de Mar del Plata, quien consideró que, en el segundo juicio oral por el femicidio de Lucía Pérez (16) iniciado el pasado 7 de febrero, quedó acreditada la responsabilidad penal de Matías Farías (29) y Juan Pablo Offidani (47) por el abuso sexual y muerte de la adolescente.
“Se puede llegar a otro desenlace (distinto al del primer juicio). Acá no se trata de crear nuevas situaciones de hecho, sino entender el trazado de algunas líneas de modo más aggiornado”, comentó el fiscal Arévalo, haciendo referencia al debate del 2018 en el cual los imputados solo fueron condenados a ocho años de cárcel por la venta de drogas y absueltos por el abuso sexual y el homicidio.
En ese sentido, el representante del Ministerio Público, que durante sus alegatos ante el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 7 marplatense pidió la pena de prisión perpetua para Farías y 20 años de prisión para Offidani, hizo referencia a la situación de desigualdad en la que se encontraba Pérez con respecto a los acusados.
“Acá hubo una situación de igualdad ficticia que llevó a una situación de abuso y posteriormente a la muerte. No podemos hablar de ningún tipo de consentimiento porque hay un adulto mayor y una adolescente. Sumado a una situación en la que una persona no puede abonar la cantidad de estupefacientes que le fueron suministrados y luego se produce la relación sexual”, argumentó el fiscal, que agregó: “Esa chica no estaba en condiciones de definir algo”.
Al respecto, Arévalo continuó: “El someterla a tener una gran cantidad de relaciones sexuales en un corto tiempo, sumado al suministro de estupefacientes la pone en una situación de riesgo de vida. Por no haberle importado ese riesgo, los imputados tienen que responder. No es que acá había una relación prexistente. Se conocían hacía un día”.
En tanto, este martes tienen lugar los alegatos de las defensas, que adelantaron que apuntarán a cuestionar la existencia del delito, y luego ambos imputados tendrán la posibilidad de brindar sus últimas palabras antes de que los jueces Gustavo Fissore, Roberto Falcone y Alexis Simaz anuncien la fecha de la sentencia.