Abel Pintos un apasionado por el cuidado de la naturaleza: la importancia de la educación ambiental
El pasado jueves en el campo “La matera“ ubicado en Mercedes, propiedad de Abel Pintos, Marcelo González y Jorge Quinteros, se inauguró un espacio integrado por un aula modelo.
La educación ambiental es uno de los pilares fundamentales para el desarrollo sostenible y la conservación de nuestro planeta. A medida que enfrentamos desafíos globales como el cambio climático, la pérdida de biodiversidad y la contaminación, es importante que todos tengamos conocimientos, valores y habilidades que nos permitan tomar decisiones instruidas y responsables sobre cómo cuidar y preservar el medio ambiente.
Inspirado en estos conceptos, el jueves 20 de junio en el campo “La matera“ ubicado en la ciudad de Mercedes Buenos Aires, propiedad de Abel Pintos, Marcelo González y Jorge Quinteros, se inauguró un espacio integrado por un aula modelo, en la cual se van a dictar diversos cursos sobre preservación del medio ambiente y educación agraria, y un sistema de viveros que permitirá a sus visitantes conocer el ciclo productivo de variadas especies. Poder enseñar desde un entorno inserto en el campo permite una mayor interconexión entre las personas y el entorno natural. Al comprender cómo nuestras acciones afectan el medio ambiente, logramos adoptar prácticas sostenibles y reducir nuestro impacto negativo. Y es que debemos tomar conciencia de lo fundamental del actuar individual para lograr una mejoría en beneficio de todos.
A través de programas educativos, talleres y actividades prácticas, que serán dictados por John Deere, la bolsa de cereales y la UBA, entre otros, los alumnos podrán desarrollar una comprensión profunda de los problemas ecológicos y contribuir a proponer soluciones innovadoras para superarlos. Mediante la colaboración y el intercambio de conocimientos, vamos trabajar juntos a nivel local, provincial, nacional e internacional , para abordar los problemas ambientales y construir un futuro más sostenible para todos.
En “La Matera” se está gestando un ecosistema especial en el que conviven las plantaciones de pecanes, almendros y duraznos, con árboles y arbustos nativos. El proyecto final contempla un bosque de más de 15000 mil árboles, combinado con un sistema silvo pastoril que ayuda de manera significativa a la reducción de la huella de carbono.
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Estamos convencidos que un proyecto de estas características nos va a permitir entender, de una manera más profunda, nuestra relación con la naturaleza, fomentar este tipo de prácticas ayuda a construir una sociedad más equitativa y consciente de la naturaleza que nos rodea.
Invertir en educación ambiental es pensar en el futuro de nuestro planeta y en el bienestar de las generaciones venideras, cuidar el medio ambiente es responsabilidad de todos.
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