Denuncia de acompañantes terapéuticos: "IOMA hace un año que no nos paga”
Por quinta semana consecutiva se movilizaron a la sede local del organismo, pero si bien tenían el compromiso de que les iban a brindar una repuesta, no hubo novedades.
Un grupo de acompañantes terapéuticos denunciaron que desde IOMA “hace un año que no nos pagan”, motivo por el cual realizaron una manifestación en la puerta de la sede local de la entidad. “Teóricamente en esta semana iban a hacer más pagos pero no tenemos ninguna novedad”, indicó María Laura Serra, representante de los damnificados.
“La mayoría de los colegas hace un año que no cobran, así que optamos por tomar estas medidas. Es el quinto lunes que vamos a la sede Mar del Plata de IOMA y presentamos notas con todos los colegas que no estamos cobrando”, comentó Serra en declaraciones a fm 99.9.
Serra informó que “la directora atendió a dos colegas y se hizo como un acuerdo con ella que iban a estar pagando la semana. De las 30 personas que fuimos el lunes pasado, solamente les hicieron el pago a dos. Volvimos otra vez porque teóricamente en esta semana iban a hacer más pagos pero no tenemos ninguna novedad”.
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La referente de los acompañantes terapéuticos indicó que hubo familias y afiliados “que han viajado a La Plata a hacer los reclamos y no hay respuesta. En La Plata dicen que se tienen que hacer cargo los que están acá en Mar del Plata y los de acá dicen que es La Plata”.
Si bien los reclamos se llevan delante de forma pacífica, Serra detalló que “no nos dejaron entrar a la sede. Había policías dentro, tres oficiales, personas de civil, como si fuéramos a hacer lío. Siempre fuimos tranquilos, sin molestar a la gente pero que a la vez los afiliados entiendan que estamos reclamando algo que, por derecho, nos corresponde”.
Y profundizó su queja sobre el trato recibido: “Cerraron la puerta con traba, cada afiliado que entraba le preguntaban qué trámite tenían que hacer, como si fuéramos delincuentes. Uno se enoja con esas actitudes también. Yo soy de Batán y había colegas de Miramar, de Mar Chiquita, de Santa Clara, es decir, no es que vivimos todos en Mar del Plata, todos tenemos gastos y obligaciones que cumplir, y que nos traten así no nos parece bien”.
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“Nosotros estamos trabajando, cumplimos horarios y tenemos que dejar de trabajar en las escuelas, aunque no nos gusta. Es una decisión que tenemos que hacer colectivamente para ver si responden, porque los chicos no pueden estar dentro de una institución educativa sin acompañantes terapéuticos. Fuimos también acompañados por afiliados, por papás, así que bueno, nos gustaría por ahí que también más afiliados nos sigan acompañando”, agregó.
Sobre el rol que desempeñan, la mujer indicó que “estamos todos los días con nuestros acompañados en el ámbito escolar, inclusive conocemos muchas más cosas que otros profesionales que los ven una vez o dos por semana. Soy mamá también de un niño con discapacidad y me pongo de los dos lados”.
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