Avances en el “Programa Memoria Histórica”
En la sede del obispado marplatense, el obispo monseñor Gabriel Mestre, se reunió esta mañana con autoridades de la Universidad Nacional de Mar del Plata, la Comisión de Reconstrucción Histórica de Legajos del Personal de la UNMdP Detenidos-Desaparecidos, las Madres y Abuelas de Plaza de Mayo y el Faro de la Memoria.
Participaron también autoridades de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos y de la Agremiación Docente Universitaria Marplatense; referentes de la Secretaria de Derechos Humanos de la Municipalidad, autoridades de la Comisión Provincial de la Memoria y representantes de otros credos.
La documentación entregada fue sobre la historia de la Universidad Católica, cuando en 1974 su rector era el cardenal Eduardo Pironio, entonces obispo de Mar del Plata. La Universidad Nacional de Mar del Plata recibió los documentos en el marco del “Programa Memoria Histórica”, para la reconstrucción de la memoria, en el que el obispado de Mar del Plata se comprometió a aportar periódicamente copias de la documentación que se encuentra en sus archivos.
Monseñor Mestre entregó al rector de la Universidad Nacional de Mar del Plata, Alfredo Lazzeretti, una copia de la historia de la conformación de la UNMDP desde la Universidad Católica; de la participación en la vida universitaria de quienes hoy se encuentran desaparecidos; actas de participación en concursos estudiantiles en la Facultad de Derecho; copia de la Resolución del Concejo Deliberante solicitando a la presidencia de la Nación gestiones sobre el paradero de la decana de la facultad de Humanidades María del Carmen Maggi, entre otras.
Uno de los documentos cuya copia se entregó hoy, señaló: “Las autoridades de la Universidad Católica de Mar del Plata, se dirigen a los estudiantes a fin de comunicarles la firma de la carta de intención firmada entre el Ministro de Educación de la Nación, doctor Ivanissevich y nuestro obispo monseñor Eduardo Pironio. Con este acto, las actuales autoridades de la Universidad Católica y su obispo diocesano, creemos que es la mejor manera de demostrar que son principios básicos que guían nuestra acción de convertir a la universidad en una comunidad donde exista plena participación de docentes, no docentes y estudiantes y cuyos objetivos sean servir a su pueblo”. Junto a las firmas del cardenal Pironio y del rector Grimberg, se encuentra la del licenciado Enrique Pecoraro como Secretario Ejecutivo, quien se encuentra desaparecido.