Día Internacional de los Monumentos y Sitios: "Mar del Plata es un libro de historia"
Así lo expresó la restauradora Costanza Addiechi quien además mencionó cuáles fueron los trabajos más difíciles que enfrentó, para mantener la identidad de la ciudad.
La preservación del patrimonio marplatense es un trabajo diario y conlleva un esfuerzo enorme por parte de la restauradora de Monumentos Históricos del Municipio local, Costanza Addiechi quien ante cualquier adversidad, siempre está dispuesta a revivir la historia.
En ese sentido, y en el marco del Día Internacional de los Monumentos y Sitios que se conmemoró el pasado 18 de abril, El Marplatense dialogó con la encargada del patrimonio de la ciudad quien explicó qué significa la profesión para ella y cuáles son sus deseos en el área.
Esta fecha tan importante para la identidad de cada pueblo, fue establecida desde el año 2001 y fue una iniciativa de ICOMOS aprobado por la Unesco, orientada a proteger, difundir y valorizar el patrimonio de los pueblos.
"Los monumentos escultóricos más representativos de Mar del Plata probablemente sean los lobos, no solo en la ciudad sino en el país y en el mundo. Son dos de los símbolos más emblemáticos. Pero tenemos un sinnúmero de ellos, absolutamente valiosos, con los cuales trabajamos diariamente para proteger, para que sean valorados como documentos únicos de nuestra historia", explicó la Restauradora.
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"Poseemos el Monumento a la Independencia Económica que también fue declarado patrimonio histórico nacional junto con el de San Martín ubicado en Luro y Mitre, entre otros tantos que fueron declarados a nivel municipal, también dictados como patrimonio artístico cultural", siguió.
Asimismo, Addiechi agregó: "Cada pieza escultórica tiene su particularidad, sus patologías que merecen toda la atención, dedicación y conocimiento para ser intervenidas. Yo creo que las piezas que me llevaron más tiempo probablemente fueron las farolas de la antigua Rambla Bristol que son de 1913, que conforman hoy el paseo de las farolas. También las del arquitecto Alejandro Bustillo de 1938 ubicadas en la misma zona. Fueron un trabajo inédito e inmenso para el Municipio".
"Las piezas escultóricas que habitan el espacio público, cada una conlleva su dificultad pero lo llevamos adelante como desafío para poder recuperar el patrimonio de todos", siguió.
"Desearía que en la ciudad, el patrimonio escultórico esté impecable siempre y que estas campañas que llevamos adelante a través de las visitas guiadas y las difusiones permanentes que hacemos del tema, generen consciencia para el cuidado y la protección de nuestras obras. Me gustaría que se encuentren siempre en perfecto estado para que sigan contando su historia", mencionó la profesional.
"Siempre digo que Mar del Plata es como un libro de historia y cada una de sus páginas es un sitio y una escultura, pero cada vez que se rompe, se vandaliza o se pierden, lo que se hace es perder una hoja de ella. Por eso deseo profundamente que sigamos trabajando en el cuidado de nuestro patrimonio y de ese modo estaremos protegiendo nuestra identidad cultural", explicó.
Y a modo de conclusión, la Restauradora expresó: "Amo mi profesión. Se manifestó en mí siendo muy chica. Adoro llevarla adelante y es un privilegio para mi poner mi conocimiento a disposición del patrimonio de la ciudad. Llevo con mucha alegría el haber podido identificar esto en mí siendo tan pequeña y cumplir mi sueño de hacerlo realidad tanto para la ciudad como para la gente".
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