Cuarentena: "Al no poder asistir las familias a los internos, explotan las cárceles porque no hay nada"
- Esta semana se vivieron horas de violencia en varias cárceles del país, como fue en el caso de la unidad penal 44 de Batán, donde los internos se rebelaron por las condiciones de encierro de cara al cierre de visitas, dispuesto en el marco de la cuarentena obligatoria por la pandemia del coronavirus.
Los reclamos de los internos van desde la presunta falta de controles médicos a los penitenciarios hasta la permanencia en el penal de reclusos que por edad se encuentran entre las "personas de riesgo”. También por la alimentación: el cierre de las visitas por cuestiones sanitarias implica el corte de ingresos de alimentos que llevan las familias de los detenidos.
"Hemos tenido algunas problemáticas en la unidad 44 de Batán, donde compañeros detenidos reclamaron días atrás al Servicio Penitenciario por la falta de barbijos y guantes. Si bien ellos firmaron un acta diciendo que no recibirían familiares por el miedo del contagio para resguardar a las familias y resguardar a los detenidos, el Servicio Penitenciario ingresa y egresa sin tomarse la temperatura y sin tomar las medidas sanitarias correspondientes", manifestó Canela Bella, ex interna, familiar de un detenido en Batán y referente del Proyecto Mecha, el cual tiene por objetivo buscar la pacificación interna de las cárceles, en declaraciones a EL MARPLATENSE.
"La realidad es que desde el domingo 15 de marzo ya no se reciben más visitas y ese fin de semana no ingresó mercadería, por lo que al no contar con la alimentación, ni la salubridad necesaria, se agrava el problema de hacinamiento y compañeros que están pasados de libertades condicionales asistidas. Problemáticas que se vienen tratando desde el 5 de diciembre, con una huelga pacífica a nivel provincial", destacó.
En referencia al estado general de salud de los internos de Batán, "en la Unidad 44 hubo represiones, con chicos lastimados y también trasladados, de manera que se ha violado el protocolo que dice que no pueden ser trasladados entre unidades penitenciarias. De todas maneras, se que el juez de Ejecución número 2, Juan Galarreta, ha pedido que se haga un relevamiento sanitario alimenticio y revisar la situación de los detenidos", afirmó la referente del Proyecto Mecha.
Al ser consultada sobre si el estado de cuarentena expone en mayor medida la problemática de las unidades penitenciarias, Bella aseguró que "la mayoría de las familias que abastecen los alimentos y la sanidad de los internos, se mueven por las mujeres que son cabeza de familia y la realidad es que estas mujeres, que mantienen a sus seres queridos o que le llevan todo lo que pueden, tapan todo "el circo" de que el servicio penitenciario le entrega todo a los presos, que gasta muchísimo dinero en los presos".
"La realidad es que ahora se ve que, al no poder asistir las familias durante varios días, explotan las cárceles porque no hay nada", concluyó.