Cuidarse del sol: necesidad de todos, privilegio de algunos
Con la llegada del verano, inaugurada por calendario este sábado, se incrementan las ventas de distintos productos relacionados con la temporada estival. Todos ellos sufren aumentos periódicos y la inflación de este año dio un impulso a esos incrementos. Uno de los artículos que más se precisan en esta época es el protector solar, para evitar los daños de la estrella epicentro de nuestra galaxia que año a año produce mayores complicaciones en la piel.
Los rayos UV (ultravioletas) traen consecuencias inmediatas para la piel como quemaduras, ampollas y enrojecimiento de la piel, y otras consecuencias tardías como envejecimiento cutáneo, arrugas, manchas y lesiones cancerígenas. Según los especialistas, la piel tiene “memoria” y puede años después arrojar los malos que venía acumulando.
Ante esta situación, las cremas protectoras de sol se vuelven un aliado esencial para las personas de todas las edades que quieran ir a la playa, a la pileta o a cualquier actividad al aire libre.
La primera recomendación que suele hacerse es evitar el contacto con el sol en las horas donde está más fuerte (de 10 a 16 aproximadamente). Sin embargo, cuando se recomienda el uso de la protección solar, entra en conflicto los altos costos de adquirirlos y mantener los cuidados de la piel.
En una de las principales cadenas de farmacias del país, el protector solar se vende desde $363 (un tamaño de 210 ml y una protección factor 15). Los precios varían en las diferentes marcas, pero un factor 30 ronda los $450 pesos en las marcas más baratas y $620 en las más caras (siempre en tamaños medianos). Los precios más caros y de factor 50 rondan los $1100 y $1200 (ningún producto supera los 210ml).
Si nos mudamos de comercios, en las cadenas de supermercados se aplican precios similares. También pueden conseguirse aplicaciones de menor cantidad o sobres de uso único. Los 50 ml de un factor 30 rondan los $200 y las opciones del mismo tamaño especial para bebés los $300.
La opción más utilizada por los clientes es aprovechar los momentos de descuentos para adquirir los productos. Si se trata de una familia tipo, durante el verano se deberán comprar varias unidades para no tener complicaciones en la piel a la hora de disfrutar las vacaciones.