Denunció las violaciones de su padre y pide que no archiven la causa
Maria Tobio denunció el pasado 29 de enero los abusos que sufrió durante su infancia y por años por parte de su padre, quien la violó en reiteradas ocasiones, la “entregó” a otros familiares y fue partícipe de múltiples casos de violencia física a los que fue sometida junto con su madre y sus hermanos.
“La denuncia la radique cuando junte fuerzas para poder hablar, en la Comisaría de la Mujer. La oficial que me atendió no tenía perspectiva de género, no sabía que preguntarme”, contó María en diálogo con El Marplatense.
El 3 de febrero, afirma que le llegó la notificación de restricción de acercamiento, “la única medida que tomaron”. En esos días, hizo público su caso a través de la red social Facebook.
“Mi padre biológico era policía, debía ser un héroe y en realidad era un villano. Abusó sexualmente de mí, me violó y me entregó a su hermano y su padre. Yo tenía que jugar con juguetes y fui el juguete de ellos. ¿A quién le podía pedir auxilio? Si quien debía protegerme, me fue matando en vida. Mi madre y hermanos junto a mi sufrían abusos psicológicos y físicos”, escribió.
Días después, se comunicaron con ella desde la comisaría y pidieron que vaya a buscar una notificación que le había llegado y le afirmaron “esto es porque te van a encajonar la causa, por prescripción”, cuando este tipo de hechos no prescriben. “Yo no tengo los recursos económicos para pagar un abogado, puse mis esperanzas en el fiscal. No tardó ni 30 días, que ya me habían archivado la causa”, contó la víctima.
“Tengo miedo que mi padre venga a matarme por haber hablado, bajo la amenaza que estuve toda mi vida. No puedo dormir sinceramente. Me despierto en cualquier momento. Me acuerdo que me llamaban con el chasquido de los dedos para que vaya con él… ya por eso no podía dormir tranquila, ahora que acabo de denunciar a mi violador, mucho menos”, concluyó.
María relató que desde los 3 hasta los 11 años sufrió abuso sexual, vivió siempre bajo las amenazas de su padre diciendo que los iba a matar y ahora vive con sus dos hijas “atemorizada de que se me aparezca”.