Día Mundial del Parkinson: el mundo se ilumina de azul para crear conciencia
En una fecha clave para la salud global, diversas ciudades participan de una iniciativa que busca visibilizar la realidad de quienes conviven con esta condición neurodegenerativa.
Cada 11 de abril se conmemora el Día Mundial del Parkinson, una fecha establecida por la Organización Mundial de la Salud en 1997 para recordar el nacimiento de James Parkinson, el neurólogo británico que describió esta enfermedad por primera vez. El objetivo de esta jornada es generar conciencia, apoyar a quienes conviven con el Parkinson —así como a sus familias y cuidadores—, y destacar la importancia del diagnóstico temprano y el tratamiento adecuado.
Como parte de las actividades conmemorativas de este año, se iluminarán de azul distintos edificios y monumentos emblemáticos alrededor del mundo, sumando visibilidad a una enfermedad que afecta a más de 10 millones de personas en el planeta, según datos de la OMS.
El Parkinson es un trastorno neurodegenerativo progresivo que impacta en las neuronas que producen dopamina, una sustancia esencial para el control del movimiento. La pérdida progresiva de dopamina genera síntomas que varían entre personas, pero que se agrupan en dos grandes categorías: motores y no motores. Entre los síntomas motores se encuentran el temblor (generalmente en reposo), la lentitud en los movimientos, la rigidez muscular, los problemas de equilibrio y coordinación, así como los cambios en el habla y la escritura. En cuanto a los síntomas no motores, pueden presentarse alteraciones del sueño, fatiga, dificultades cognitivas, pérdida del olfato, problemas digestivos y urinarios, y cambios emocionales como depresión o ansiedad.
Puede interesarte
Aunque la incidencia de la enfermedad aumenta con la edad, se estima que un 4% de los casos se diagnostican antes de los 50 años. Casos como el de Ellie Finch Hulme, diagnosticada a los 29, recuerdan que puede aparecer incluso en personas jóvenes. Además, un informe de Parkinson’s UK reveló que el 87% de los pacientes afirma haber sido víctima de discriminación o acoso por su condición.
Actualmente no existe una cura, pero sí tratamientos que ayudan a controlar los síntomas y mejorar la calidad de vida. Estos incluyen medicación (como la levodopa), terapias físicas y ocupacionales, y en algunos casos, procedimientos quirúrgicos como la estimulación cerebral profunda. También se promueven cambios en el estilo de vida relacionados con el ejercicio físico, la alimentación y el manejo del estrés. Paralelamente, continúan avanzando investigaciones prometedoras: terapias génicas y celulares, nuevos fármacos, infusiones continuas de levodopa y el estudio del eje intestino-cerebro como nueva vía de abordaje.
El diagnóstico es clínico y debe ser realizado por un neurólogo especializado en trastornos del movimiento. Detectar la enfermedad de forma temprana es fundamental para iniciar cuanto antes el tratamiento y prevenir complicaciones.
Puede interesarte
Desde el área de Neurología del HPC explican que los trastornos neurológicos —entre los que se encuentra el Parkinson— afectan en todo el mundo a cerca de mil millones de personas. Estas enfermedades incluyen también epilepsia, Alzheimer, ACV, esclerosis múltiple, migrañas, tumores cerebrales, infecciones neurológicas y traumatismos craneoencefálicos.
Frente al impacto que estas patologías pueden tener en la vida cotidiana —como caminar, alimentarse, hablar o participar socialmente—, la rehabilitación cobra un rol esencial. A través de este proceso, las personas afectadas pueden mejorar capacidades, compensar limitaciones y recuperar su funcionalidad, acompañadas por un equipo interdisciplinario compuesto por profesionales de Kinesiología, Enfermería, Trabajo Social, Nutrición, Terapia Ocupacional y Fonoaudiología. El trabajo conjunto de estas áreas permite abordar integralmente cada caso y brindar apoyo también al entorno familiar del paciente.
Comentarios
Para comentar, debés estar registrado
Por favor, iniciá sesión