Edificio Pigeon: una ventana a la historia de Mar del Plata
Por Juana Martí
Pasan los años, y aunque podamos -y debemos- cambiar, los cimientos quedan. En una ciudad, el patrimonio histórico es tan importante como los hechos que la marcan, es el espejo de un pasado. Y aunque nos decepcione que a veces se derrumba, todavía quedan hitos urbanos en Mar del Plata.
El Edificio Pigeon, ubicado frente al mar, es una de las construcciones emblemáticas que se conservan en nuestra ciudad, y para recordarlo o conocerlo en tiempos en los que no podemos ir a la costa a apreciarlo, traemos un poco de su semblanza.
Fue inaugurado en 1946, una época en la que en Argentina el desarrollo del turismo fue transformador y una década en la que Mar del Plata estaba entre los destinos privilegiados.
Víctor Pegoraro, Magíster en Historia, habló con El Marplatense y contó por qué es considerado patrimonio arquitectónico, qué cambios generó en la ciudad y de dónde viene su nombre.
“Ubicado en uno de los puntos más atractivos de Mar del Plata, en Bv. Marítimo 3155, la obra destaca por su arquitectura señorial, sobre la costa, con vistas al mar y miras a la Rambla Casino. Puede ser considerado como uno de los primeros edificios en altura que cambió la fisonomía de la ciudad”, expresa.
Y es que, cuando viajamos o alguien vuelve de viajar, entre las fotos que se registran vamos a encontrar edificios o casas características del lugar, que marcan el estilo y el aspecto de una ciudad y son muestra de la cultura de la misma.
“El Pigeon fue encargado por la inmobiliaria de Buenos Aires "Mazar Barnett y Giralt" al arquitecto Manuel Shuvacs y al constructor Vicente Zambelli. El objetivo era alquilar cada departamento a las familias distinguidas durante la temporada de verano”, cuenta el historiador.
En cuanto a su nombre, Pegoraro explica que, "al estar ubicado frente al Torreón del Monje, tomó el nombre del “Pigeon Club”, local que funcionó desde el año 1929 en el mismo complejo. Era un reducto aristocrático donde se practicaba, por la tarde y a la hora del té, el deporte selecto de la época: “tiro a la paloma”.
Al preguntarle el por qué de que sea considerado patrimonio histórico, el Magíster nos detalla el exterior de la construcción: “La fachada tiene similitud con los materiales y la estética particular utilizada en el Casino: piedra, ladrillo a la vista y pizarra negra. Sobresalen la escalinata y los zócalos de piedra blanca de Chapadmalal que le dan un aspecto señorial”.
Y como para transportarnos hasta ahí, nos mete puertas adentro del edificio: “El hall de entrada posee zócalos de mármol rosado de Córdoba y pisos graníticos del mismo color”.
"El edificio Pigeon tuvo un carácter único para la época porque combinaba las ventajas y comodidades de un hotel. Cada familia que ocupaba un departamento podía realizar sus comidas en el salón comedor, o en su propia vivienda, con servicio del restaurant o bien hacerlo fuera de la casa”, comenta.
Hoy en día, con la actividad inmobiliaria acelerada, -no precisamente en este momento de pandemia-, hay muchos edificios emblemáticos que son derrumbados para construir torres modernas.
Los vecinos de Mar del Plata más de una vez han reclamado la protección del patrimonio edilicio de la ciudad, derribarlos es quitarles el derecho a los ciudadanos de disfrutar de su diseño histórico y cultural.
Respecto a la importancia de la conservación, Pegoraro indica que, “conociendo algunos datos podemos llegar a descubrir las herramientas para proteger y defender parte del patrimonio arquitectónico que nos han dejado nuestros antecesores”. Y añade: “Muchos edificios y casas importantes han sucumbido ante la piqueta a través de los años, lo que no se preserva se pierde para siempre”.
“La historia del edificio Pigeon es una ventana que nos lleva a conocer la historia de Mar del Plata. Saber el pasado de nuestras construcciones emblemáticas nos ayuda a tomar conciencia del lugar en el que vivimos”, concluye.
Así como los hechos históricos y la memoria de ellos construyen la identidad de un país y una ciudad, conservar el patrimonio arquitectónico es igual de importante para reforzarla y realzar su valor.