Desde Mar del Plata crearon un producto innovador, "único en Argentina y en Latinoamérica"
Augusto y Axel se instalaron en la ciudad y lanzaron al mercado "gomitas con un touch de alcohol", una producción que hoy está presente en más de 50 comercios locales.
En la búsqueda de historias de emprendedores marplatenses, la ciudad se topó con dos porteños Augusto y Axel que si bien son de Capital Federal, decidieron radicarse en Mar del Plata hace algunos años, ya que que los encandiló por su belleza y movida nocturna y en ese sentido crear un producto único en Argentina y Latinoamérica.
En poco más de un mes, lanzaron una producción de tres sabores distintos, de “gomitas con un toque de alcohol” de gin tonic, fernet y daikiri, una golosina creativa que está hecha tragos y que ya se vende en más de 50 comercios de la ciudad. “Touch Gummy”, como lo definieron sus creadores, empezó a hacerse conocido mediante redes sociales y con muestras gratis en distintos puntos estratégicos de Mar del Plata. Así fue como alcanzaron la producción de 3000 unidades por día.
Como todo comienzo desde cero, los emprendedores de 29 y 32 años, que ya poseían experiencia en crear productos para el ámbito nocturno, decidieron innovar de forma casera con gomitas y alcohol pero en ese camino, descubrieron que lo producido duraba tan solo tres días. Ahí fue cuando decidieron avanzar más con la idea y se propusieron, junto a profesionales, extender no solo la fecha de caducidad sino elaborar en mayor cantidad y comercializarlas.
Actualmente el producto posee Registro Nacional de Establecimientos (RNE) y Registro Nacional de Productos Alimenticios (RNPA), tal como lo establece el Código Alimentario Argentino (CAA) para garantizar el certificado de las autoridades sanitarias jurisdiccionales tanto a la empresa como el producto. En su llegada a la ciudad, el Municipio les dio “una mano enorme” para encontrar lugar en donde fabricar y así fue como pudieron poner manos a la obra.
"Nosotros comenzamos nuestra carrera de emprendedores con otros productos hace algunos años, siendo este nuestro tercer o cuarto laburo. Uno de ellos fue una botella de alcohol que tenía alrededor gomitas, en el packaging. Nosotros veíamos en las previas o en los boliches que no había nada nuevo, solo bebidas saborizadas. Entonces nos propusimos innovar con gomitas en esos ámbitos, en juntadas y observamos que a la gente le encantaba porque la experiencia era simple, sacarlas del paquete, ponerlas en un bowl con vodka y a los 40 minutos esas mismas se convertían en shots de esa bebida", dijo uno de sus creadores, Axel zin.
"Ahí nos dimos cuenta de que a la gente le encantó la idea y decidimos hacer nosotros de forma casera las gomitas pero ya con alcohol, en ese caso, vodka puro. Volvimos a notar aceptación en el producto y pensamos algo nuevo, tragos llevados a las mismas, por ejemplo de gin tonic, con gin, tónica y limón. Esto se nos ocurrió porque entendimos que un producto solo con alcohol puro es más para previas y armamos algo para que se pueda consumir en cualquier momento del día", mencionó.
"Nuestro producto hoy tiene un 1% de alcohol, no da ningún tipo de problema con alcoholemia. Por supuesto depende de la cantidad que comas pero no tiene restricción para su consumo como al igual que esos bombones que poseen licor y los venden en los kioscos. Incluso hasta tenemos menos medida que muchos de esos chocolates. Esto es único en Argentina y en Latinoamérica", adhirió.
"También es apto para celíacos, es como cualquier otra gomita con un único agregado que es alcohol. Pensamos en un futuro agregarle el sello certificado pero eso seguramente esté encarado el año que viene", aseguró su creador.
Y agregó: "Con esto, buscamos satisfacer a un público que no lo estaba, los jóvenes desde 18 años para arriba, a los cuales les gusta tomar tragos, sentir una gomita con un sabor diferente y con un touch de alcohol. No para emborracharte sino que sea algo para comer en cualquier momento del día".
"Los productos que creamos anteriormente ya no siguen vigentes. Todo eso se terminó en la pandemia cuando tuvimos que cerrar un bar que teníamos, en donde vendíamos lo que habíamos diseñado. Ahí fue cuando nos dedicamos 100% al desarrollo de este producto que nos llevó aproximadamente dos años y medio", sumó.
"La primera producción la hicimos en nuestras casas pero las gomitas duraban tres días. Nosotros estudiamos dirección de negocios, nada que ver con la ingeniería de alimentos pero vimos la oportunidad y empezamos a hablar con la gente del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI), contratamos ingenieros que nos puedan dar una mano para poder desarrollarlo. Nos llevó dos años y medio crearlo pero alcanzamos una durabilidad de un año, con un vencimiento largo y que soporta estar fuera de la heladera. Porque antes de forma casera, la gelatina necesitaba estar refrigerada", siguió el emprendedor.
"Al haber alcanzado esas dos cuestiones, se puede ofrecer en cualquier punto de venta y por eso nos ubicamos en kioscos, en almacenes, supermercados. Hoy ya estamos en más de 50 comercios habiendo arrancado hace tan solo un mes mas o menos y eso nos tiene muy contentos", refirió.
"La idea de nuestro emprendimiento es que justamente como tiene una durabilidad larga, es que lo podamos vender en otras partes del país. Ya tuvimos algunas ofertas pero en un principio solo queremos estar en Mar del Plata y más adelante veremos. Lo que si, ya tenemos en mente es el desarrollo de dos o tres productos nuevos, otros tragos que se sumarían a los que ya tenemos, gin tonic, fernet con coca y daikiri. En este momento tenemos trabajando tres personas con nosotros siendo dos en producción y uno más que se encarga de la parte administrativa y vendedores independientes que son quienes ofrecen el producto y ven los puntos de venta".
Con respecto a la producción, Zin explicó: "Este proceso arranca con la cocinadora donde Augusto cocina el producto con la gelatina y los demás ingredientes. Eso llega a ciertas temperaturas y una vez que está listo, todo eso se coloca en los moldes con una máquina dosificadora. Una vez que esos están llenos, van al abatidor que es un congelador del producto que lo que hace es, en vez de tardar 2 horas y media como una heladera tradicional, tarda 15 minutos en que la gomita llegue a -3 grados en su interior".
"Ahí es cuando está en condiciones de entrar al siguiente paso, los secaderos. Esos, tal como lo dice su nombre, secan la gomita, le saca el agua al producto en aproximadamente 48 horas para que luego de eso, el producto tenga una vida útil de un año y dure más tiempo porque a mayor cantidad de agua, mayor generación de microorganismos y así es como se pudre la gomita", dijo.
"Luego pasa a la glaseadora en donde se le tira un ingrediente con el cual da vueltas y eso le otorga brillantes, hace que no se peguen entre sí. El siguiente paso ya es ponerlas en los paquetes, en la empaquetadora donde se sella y a las cajas, listas para vender", concluyó.
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