El actor y director Gustavo Garzón se refirió en duros términos a las políticas implementadas por el Gobierno de Javier Milei, especialmente en el sector cultural. En la jornada en la que se anunció oficialmente el cierre del INCAA para una reestructuración del organismo, el artista consideró que lo que está pasando es “la destrucción del cine argentino”.

En declaraciones a Los datos del día, por Radio Mitre Mar del Plata, Garzón dijo que “a nivel emocional” sentía “una gran tristeza” por esta novedad, pero no sólo él sino “todos los que formamos parte del colectivo audiovisual”.

Y en relación a la incertidumbre que atraviesa el sector, consideró que esta “situación ya no es incierta, es espantosa”. Garzón destacó: “Acá sabemos lo que está pasando y es la destrucción del cine argentino. Destruir es muy fácil, reconstruir es muy difícil. Puedo coincidir con que en el INCAA trabajaba demasiada gente, se puede haber bajado la cantidad; puedo coincidir que la sección de películas por ahí no era de excelencia. ¿Se podría mejorar el INCAA?, por supuesto. ¿Pero destruirlo?”.

El actor, que además dirigió dos películas, destacó la importancia del área audiovisual al recordar que “del cine argentino viven 100.000 familias” y asegura que se trata de “una industria que está muy arraigada, con mucha tradición con miles de jóvenes que estudian para hacer películas. Ahora para qué van a estudiar si no va a haber películas para hacer”.

Para Garzón esta decisión del Gobierno nacional “termina con toda una cuestión de la que nosotros formamos parte con orgullo, con alegría, sintiéndonos modelo en Latinoamérica. Porque no hay país de Latinoamérica que produzca el cine que se produce en Argentina, donde venia gente de toda la región a estudiar cine. El cine argentino es admirado, no sé si en todo el mundo, pero todos nuestros vecinos admiran nuestras producciones”.

Además, el actor se refirió a los argumentos que se esgrimen para generar recortes en el cine, como por ejemplo la idea de que se hacen películas mientras hay gente que se muere de hambre: “Entonces qué haces, ¿hambreás un sector para darle de comer a otro? Creo que hay una cuestión ideológica y moral de desprecio por la cultura nacional, por todo lo que no genera ganancias económicas. Todo lo que no genera ganancias es inútil, entonces estamos en problemas graves”.

Sobre los cambios que podrían haberse implementado en lugar de políticas tan drásticas, Garzón reconoció que es “inútil hablarlo ahora porque lo están cerrando”. Y consideró que “esto lo teníamos que haber debatido antes, pero ahora para qué. Qué voy a decir cómo es mejor el INCAA si no va a existir más. Estos lo tendríamos que haber charlado y que el Gobierno escuche, que convoque, que sepa de qué se trata el cine argentino, que sepa cuántas personas trabajan”.

“Si sobraban 50 personas bien, saquen a las personas que sobran, pero no destruir una cultura arraigada durante década y décadas”, sostuvo el actor y director.

Por último, Garzón reconoció que personalmente tiene otras actividades, pero que “hay gente que vive de y para el cine, que el cine le daba sentido a su vida, no solo ingresos monetarios. Esa gente se queda sin destino. Ahora ya es tarde. La gente votó este gobierno y tenemos que bancar las cosas que hace. En vez de una convivencia entre todos los sectores que hacen al país, están destruyendo los sectores que son sostén”.