El presidente Mauricio Macri pidió a los argentinos "paciencia" para impulsar todos los "cambios" que busca materializar este Gobierno después de acusar múltiples falencias estructurales en el país a lo largo de las últimas décadas "por no hacerse cargo de los propios problemas".

El mandatario apuntó su postura como de uno de los ejes troncales que tuvo el discurso que brindó durante la mañana de este viernes frente a la Asamblea legislativa en el recinto del Congreso de la Nación para inaugurar el período de sesiones ordinarias.

“Inaugurar el ultimo año de este mandato es igual de emocionante que la primera vez. Ese día dije que a Argentina la íbamos a sacar adelante entre todos. Fue la decisión mas valiente que tomamos juntos. Nos propusimos cambiar nuestro país en serio“, reconoció, y agregó: "Esto no es tarea sencilla; lo sabemos bien. Cambiar en seria implica atravesar varias dificultades".

En el mismo sentido, el jefe de Estado destacó su decisión de "dejar de patear los problemas para adelante para empezar a mirar la realidad frente". "Entendimos que el país depende de nosotros y de nadie más... Cuántas veces en la historia elegimos el camino del atajo y siempre terminamos pagando las consecuencias", señaló.

"Los cambios profundos requieren paciencia. Muchos van a pensar 'yo estoy peor que hace unos años, ahora todo me cuesta más' y otros dirán que 'yo acá dije lo peor ya pasó' y tienen razón pero dejenme decirles que lo que estamos logrando es enorme; estamos haciendo crujir estructuras viejas y oxidadas, muy arraigadas que beneficiaban a los de siempre", aseguró.+

Para Macri, los cambios que se lograron ya "no tienen vuelta atrás" porque implican una Argentina que "piensa y vive de una nueva manera". "Ya no nos da todo lo mismo, no aceptamos que nos mientan ni pongan ene jaque la Constitucionalidad de nuestra democracia. Las transformaciones profundas llevan tiempo", insistió, y consideró: "Si estoy liderando este cambio a largo plazo es porque los argentinos me eligieron, es gracias a todos ustedes".

El presidente apeló al apoyo del pueblo en las elecciones frente a los insultos e interrupciones que se hicieron sentir en el recinto del Congreso. "Esos gritos e insultos no hablan de mí, hablan de ustedes señores. Yo estoy acá por el voto de la gente", respondió.

El máximo referente que tiene el Gobierno nacional también prometió una "baja sustancial" en los índices inflacionarios y confió que eso "será un alivio para todos", al mismo tiempo que reflexionó sobre el alto margen de pobreza que afecta al país.

"Uno no es pobre por lo que gana a fin de mes, esa es una cara; la pobreza y ese núcleo duro de pobreza estructural tiene que ver también con la libertad y dignidad perdida. Esto empieza a bajar cuando un Estado se propone trabajar en serio y sin pedirle a los pobres que vayan a marchar a cambio de un favor, esa costumbre denigrante", apuntó.

Macri no evitó reconocer que las complejidades económicas que se profundizaron desde mediados del año pasado en el país tiene su principal impacto negativo en "los más chicos", por lo que garantizó un fuerte aumento en la Asignación Universal Por Hijo (AUH). "En base a esto y con la clausula del acuerdo con el FMI aumentamos un 46% la AUH", reveló.

Asimismo, el Presidente hizo referencias, sin nombrarla, hacia su antecesora, Cristina Fernández de Kirhner, y dijo que su administración trabaja "en base al diálogo y sentándose en la mesa con todos los sectores". "No utilizamos los medios públicos para imponer un mensaje único´. Promovemos la pluralidad de voces. Damos conferencias, reportajes, respondemos preguntas y pedidos de informe de legisladores, como ya hicimos 815 veces", remarcó.

"Durante dos años y medios logramos avances concretos: impulsamos el turismo, avances en Internet, parques nacionales, programas de calidad educativa, debate por el aborto, bajamos la pobreza, aumentamos en 700 mil los puestos de trabajo", rememoró y ratificó: "Hacemos cambios profundos para no volver atrás nunca más".

Con fervor, Macri encaró el último tramo de su discurso para volver a insistir con que "el tiempo de la Argentina es hoy". "No dejemos que los predicadores de la resignación y el miedo le ganen a la esperanza, porque nuestra esperanza es fuerte y está basada en lo que sabemos hacer", indicó.

"Soy el primero en saber todo lo que pasamos, me he hecho cargo del dolor y la angustia de todos estos meses, pero estoy seguro que esta es la generación que con valentía decidió encarar lo que nunca se había hecho. Hacer cambios de verdad, que son los que necesitábamos y esperábamos", dijo, y concluyó: "¡Vamos argentinos con fuerza, vamos en serio, vamos con coraje, vamos con pasión, este es nuestro país y juntos los vamos a sacar adelante!".