Referentes locales de la Federación de Clínicas, Sanatorios y Hospitales de la Provincia de Buenos Aires (FECLIBA) sumaron su preocupación por el impacto que tiene la crisis del país y exigieron que el Gobierno que tome medidas para evitar consecuencias mayores en la actividad.

Jorge Soria, el presidente de la entidad en el distrito 9 en el que se incluye a Mar del Plata, reconoció estar "muy preocupado" al tener en cuenta que las variables que se trazan para los próximos meses "no son muy alentadoras". "Esperábamos alguna recuperación pero lo que golpea fuerte son la suba en los insumos y servicios y el costo salarial, que indudablemente es necesario pero está desfasado con respecto a lo que pagan las obras sociales y prepagas", señaló.

El referente del sector advirtió un escenario actual "difícil y muy complicado" pero aseguró que se está "negociando permanentemente en los niveles gubernamentales para tratar de subsistir y ver si esto se soluciona de alguna manera".

"Si no se pone freno a una serie de dificultades impositivas, si no hay una solución al valor del dólar que encarece todos los productos que necesitan las clínicas, esto de acá a unos 4 o 6 meses puede terminar en otro tipo de conversación", alertó, en declaraciones a El Marplatense.

Soria dijo que por ahora las clinicas descartan "restringir cualquier tipo de servicio", tal como ha sucedido en otras oportunidades, y aseguró que en Mar del Plata se está "peleando y luchando para que no haya desatención a la masa de los trabajadores".

"Antes la demora era un problema fundamental, pero ahora el problema es conseguir un arancel justo como para brindar una prestación de calidad. Alguien se tiene que hacer cargo. Son muchas obra sociales, hay que hablar con cada una de ellas, y esto es lo que lleva tiempo. Esto está costando porque sabemos que las obras sociales perdieron afiliados", reconoció.

A partir de los vaivenes económicos constantes, el titular de Fecliba aseguró que el análisis que se hace de la situación es "permanente" y se mostró expectante de que el Gobierno pueda lanzar créditos con tasas de interés que permitan el acceso de las entidades sanatoriales. "Necesitamos que haya una consideración especial; esto no es una fábrica que produce y vende, son servicios básicos", aclaró.

"El hospital público no da abasto para atender a toda la población entonces las clínicas privadas, que son portadores de un servicio público y solucionan una cuestión que debería ser responsabilidad del Estado, deben ser consideradas de otra manera impositivamente", fundamentó.

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