A pesar de que finalmente no hubo reunión de traspaso de mando, Moyano anunció a través de las redes sociales que es el nuevo presidente de la institución pero sin hacer una transición respecto del presidente saliente, Wenceslao Méndez. El ex diputado sueña con poner al equipo en Primera.

Lo quiso y lo hizo. Facundo Moyano se proclamó esta tarde como presidente del Club Atlético Alvarado reemplazando a Wenceslao Méndez en el cargo en la semana previa a la fecha final del Torneo de la Primera Nacional.

Si bien se indicaba que primeramente habría una reunión donde se trabajaría una especie de transición entre el presidente saliente y quien tomaría la posta; eso nunca sucedió. A través de las redes sociales, Moyano confirmó su nuevo cargo: “asumí como presidente de Alvarado. Es una alegría inmensa poder estar en el club que es parte de mi historia familiar y afectiva”, comentó.

Luego agregó que “se vienen grandes desafíos deportivos y vamos a estar a la altura para hacerles frente. Queremos un club renovado, con más obras y nuevos espacios, donde se revaloricen otros deportes. Nuestro compromiso será devolverle a los marplatenses el clásico futbolero”. Este último dato es importante porque el gran objetivo que parece traer para su gestión es llevar a Alvarado a la Primera División del Fútbol Argentino.

Mientras tanto tendrá que comenzar a reorganizar internamente el club en las cosas que considere que se deben hacer modificaciones. Parece comenzar una nueva etapa en el “Torito” aunque Facundo Moyano siempre estuvo cerca de diferentes gestiones pero después no terminaba de ratificar esa presencia en la gestión propiamente dicha.

Ahora parece asumir el compromiso completo pero de una forma que quizás no sea la óptima porque no hubo reunión de Comisión Directiva y tampoco una transición formal con “Wenchy” Méndez.