El Ferrari F8 Tributo logró captar la atención del mundo del motor en el Salón de Ginebra, Suiza. El nuevo deportivo de la marca italiana se destaca, entre otras cosas, por llevar uno de los motores V8 más potentes del mundo para autos de serie, es decir, que están a la venta al público.

Su mecánica es un 3,9 litros de 720 CV. Tiene dos turbocompresores y está ubicado en posición central trasera, entre el habitáculo y el eje posterior. Gracias a su motor V8 acelera de 0 a 100 km/h en 2,9 segundos y alcanza una velocidad máxima de 340 km/h.

Una de las mejoras, declaró Ferrari, es en el sistema Side Slip Control. Lo que este hace es analizar en milésimas de segundo el deslizamiento lateral del vehículo en curva, compararlo con valores ideales y repartir el par motor entre las ruedas de forma tal de hacer más eficiente el giro.

También se trabajó en la aerodinámica, que es un 10% más efectiva en relación al 488 GTB, modelo al que reemplazará. Además, según la marca, es 40 kilos más liviana. La caja es automática secuencial de 7 marchas y la tracción posterior.

La F8 Tributo heredó varios sistemas de avanzada de la versión 488 Pista. Un ejemplo es la refrigeración, con radiadores delanteros especiales y tomas de aire posteriores adaptadas para el modelo.

Gracias al rediseño se agregaron entradas de aire para refrigerar mejor los frenos, por lo que Ferrari anunció que, sin modificarlos, mejoran su desempeño en relación a los de la 488 GTB.

El alerón fue replanteado, por lo que aumenta la carga aerodinámica para mejorar la estabilidad del auto, mientras que también se revisó lo que la marca denomina S-Duct, un flujo de aire que va desde la parte delantera a la posterior para aumentar la carga aerodinámica.