La alimentación en el embarazo
Según el Consejo Argentino sobre Seguridad de Alimentos y Nutrición (CISAN) durante el último trimestre es necesario un mayor consumo energético.
De acuerdo con el Consejo Argentino sobre Seguridad de Alimentos y Nutrición (CISAN) durante el embarazo es importante seguir la ganancia de peso. Para ello, es necesario conocer el peso y la talla de la mujer antes del embarazo y/o durante el embarazo.
Una insuficiente ganancia de predispone a nacimientos prematuros y de bajo peso al nacer; mientras que una excesiva se asocia a mayor riesgo de diabetes gestacional y pre eclampsia en la embarazada y nacimientos por cesárea y de alto peso al nacer.
¿Cuál es la ingesta calórica necesaria?
Una mujer adulta con un peso normal necesita 2.000 Kcal/día en promedio. De acuerdo a reconocidos organismos internacionales, en la mujer adulta embarazada las necesidades energéticas aumentan según el trimestre de embarazo.
Por ejemplo, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, siglas en inglés) estima que durante el primer, segundo y tercer trimestre, una embaraza necesita 85, 285 y 475 Kcal/día adicionales, respectivamente.
Por su parte, el Instituto de Medicina (IOM, siglas en inglés) de Estados Unidos estima que las necesidades de energía durante el segundo y el tercer trimestre son de 340 Kcal/día adicionales.
Durante el primer trimestre no recomienda una ingesta de energía (Kcal) diaria adicional, debido a que el gasto energético total aumenta muy poco y a que el aumento de peso es menor.
Recomendaciones para una alimentación saludable
- Realizar 4 comidas al día (desayuno, almuerzo, merienda y cena) incluir verduras, frutas, legumbres, cereales, leche, yogur o queso, huevos, carnes y aceites.
- A lo largo del día beber al menos 2 litros de agua (entre 2,3 y 3 litros por día).
- Consumir a diario 5 porciones de frutas y verduras en variedad de tipos y colores.
- Reducir el uso de sal y el consumo de alimentos con alto contenido de sodio.
- Limitar el consumo de bebidas azucaradas y de alimentos con elevado contenido de grasas, azúcar y sal.
- Consumir diariamente leche, yogur o queso, preferentemente descremados.
- Al consumir carnes quitarle la grasa visible, aumentar el consumo de pescado e incluir huevo.
- Consumir legumbres, cereales preferentemente integrales, papa, batata, choclo o mandioca.
- Consumir aceite crudo como condimento, frutos secos y/o semillas.
- Las mujeres embarazadas no deben consumir bebidas alcohólicas.