La Cámara de Armadores promueve el reciclado de redes de pesca en desuso
En el marco de la cuarta cumbre de la Alianza Latinoamericana para la Pesca Sustentable y la Seguridad Alimentaria (ALPESCAS), realizada el pasado jueves y viernes en Mar del Plata, la Cámara Argentina de Armadores de Buques Pesqueros de Altura (CAABPA) promovió un innovador proyecto para comenzar a reciclar redes de pesca en desuso.
La entidad empresaria local suscribió un acuerdo de cooperación con la firma Bureo Inc., dedicada a darle un nuevo destino a materiales plásticos que recoge de la industria pesquera en diferentes países. Aquí estuvo representada por Ben Kneppers, su cofundador. Al mismo tiempo, la iniciativa tiene el respaldo de Moscuzza Redes, en cuya planta marplatense comenzó el acopio de artes de pesca que ya están fuera del circuito comercial.
El programa piloto se denomina Net Positiva Argentina y busca disminuir la presencia de agentes contaminantes en el mar, particularmente plásticos y polietileno de alta densidad. Si bien no hay datos oficiales, se estima que en la Argentina se descartan por año unas 200 toneladas de redes. En muchos casos se abandonan en puertos, playas y galpones; en otros, directamente se las entierra en basurales.
Ahora, la idea en el sector es darles otro destino. Mediante diversos procesos es posible transformar las redes en pellets (compuestos de plástico), que se convierten en la materia prima para la posterior producción de anteojos de sol, gorras, skates, quillas para tablas de surf y sillas. Algunos de esos productos pudieron verse durante el encuentro de Alpescas a manera de muestra.
“Minimizar la generación de residuos es parte de nuestra responsabilidad social empresaria; por eso, nos sumamos al proyecto. Es un trabajo que ya comenzamos a implementar en Mar del Plata con la colaboración de distintos actores de la industria”, expuso el presidente de CAABPA, Diego García Luchetti.
En principio, se recolectaron 15 toneladas de redes. Fueron 9 toneladas de empresas marplatenses y 6 toneladas provenientes de Puerto Madryn, provincia de Chubut. El acopio se centraliza en la planta de Moscuzza, desde donde se enviará el material a la recicladora del Bureo en Chile. Esto hasta tanto pueda realizarse ese reproceso en la Argentina.
“Somos conscientes de lo grave que es la contaminación plástica y sus efectos en el ambiente y por eso es que estamos ofreciendo a nuestros clientes la posibilidad de retirar las redes descartadas para transformarlas en nuevos productos a través del programa”, apuntó el gerente comercial de Moscuzza Redes, Adrián Georgetti.
Por su parte, Kneppers reivindicó la suma de voluntades como un medio para atenuar posibles efectos contaminantes: “Con esta iniciativa, las redes de pesca se integran a un sistema de economía circular. Además, sumamos al Instituto de Conservación de Ballenas para fortalecerla aún más, ya que su rol será el de identificar proyectos de educación y conservación marina que ayuden a prevenir enmallamientos de ballenas y la contaminación plástica en el Mar Argentino”, completó.