“La salud mental de los jóvenes debe ser priorizada y cuidada en todo momento"
Fue una apreciación de la licenciada en Salud Patricia Fortina, luego de la conmemoración del Día Internacional de la Juventud. Reremarcó la importancia de “hablar abiertamente todos los temas con los jóvenes”.
Por el Día Internacional de la Juventud que se conmemoró ayer 12 de agosto, la licenciada en Salud Patricia Fortina destacó que “la salud mental de los jóvenes debe ser priorizada y cuidada en todo momento”, al mismo tiempo que brindó recomendaciones sobre la manera en que los adultos deben actuar frente a este grupo, como promoviendo sus libertades y la autonomía de decisión.
De acuerdo a la especialista, en esta fecha se busca “promocionar el potencial de los jóvenes y mostrar que son un pilar fundamental del futuro de cualquier sociedad”. Entonces, explicó: “El grupo de jóvenes debe adaptarse a un mundo en que escuchan generalizaciones despectivas por parte de los adultos, lo que se debe corregir. Son jóvenes que nacieron con avances tecnológicos, computadoras, teléfonos, videojugos y música digital, que antes no existían, y todas son herramientas que les marcan cambios en la comunicación, la forma de interactuar y la velocidad entre ellos y el resto del mundo”.
Sin embargo, consideró que es una problemática “global” y que “existe una brecha digital entre generaciones, pero también entre sus pares, lo que marca una diferencia”. Por ejemplo, indicó que “en Argentina, solo el 16% de los jóvenes termina el secundario en tiempo y forma”, lo que hace muy difícil adaptar a ese grupo a los cambios mencionados.
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Y frente a los cambios generacionales, que también recaen en los docentes y los padres, Fortina sostuvo que “se debe tener en centa que los adolescentes tienen características propias de la edad, rechazan códigos impuestos, valoran la libertad y nuevas costumbres generacionales, no quieren modelos antiguos, sufren cambios corporales y hormonales, se creen omnipotentes y son trasgresores”. Por eso, detalló que es un “mundo desigual” y que “mientras los jóvenes deben aprender a manejarse en un mundo de adultos, los adultos deben respetar las particularidades de los jóvenes”.
“Es una tarea prioritaria que los adultos debemos acompañar, comprender y permitirles descubrirse a ellos mismos, ser empáticos, hablar con ellos, escucharlos y enseñarles a pedir ayuda. Hay que promover sus libertades y la autonomía de decisión, también estrategias para la autovalidez y sobre todo, la responsabilidad. Debemos promover la formación educativa, profesional y en oficio, ya que tienen que entender que la responsabilidad que van adquiriendo en capacitación e información porque ese es el sostén que tendrán a lo largo de su vida”, recomendó.
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Y por último, remarcó la importancia de “hablar abiertamente todos los temas con los jóvenes”, como las inseguridades, las dudas, el conocimiento o la prevención de enfermedades, y que si no es posible hacerlo por nuestros propios medios, “hay que saber derivar para que puedan solucionar y conocer el mundo que los espera”.
“La salud mental de los jóvenes debe ser priorizada y cuidada en todo momento, porque en la juventud es cuando por primera vez eligen el futuro que les está por llegar”, concluyó.
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