La Sociedad Argentina de Vacunología lanzó un sitio dedicado a la prevención de la gripe
La Sociedad Argentina de Vacunología y Epidemiología (SAVE) desarrolló un sitio web llamado #Gripe2020 (www.save.org.ar/gripe2020), de navegación sencilla y con información clara y concisa, con el objetivo de aumentar la concientización sobre la importancia de la vacunación antigripal, los grupos de riesgo, los tipos de vacunas disponibles, preguntas frecuentes y mitos sobre la gripe.
La vacuna antigripal es una herramienta fundamental para prevenir complicaciones y muerte en población en riesgo. Todos los años numerosas personas mueren por causa de la gripe en Argentina y en la mayoría de los casos, tenían indicación de vacuna y no estaban vacunados.
“Todas las personas deberían poder informarse con una fuente confiable, derribar mitos sobre la gripe y la vacuna, conocer quiénes deben vacunarse. Nos parece indispensable reunir toda esa información en un sitio accesible y completo como el que desarrollamos”, detalló la epidemióloga Florencia Cahn, presidenta de la SAVE.
“Si bien la vacuna antigripal no previene COVID-19, ayuda a prevenir las complicaciones de la gripe. De ahí la importancia de que los grupos de riesgo se apliquen la vacuna antigripal”, explicó Cahn, una de las asesoras del Gobierno nacional en el marco de la pandemia por coronavirus.
La gripe o influenza es una enfermedad viral respiratoria que se presenta habitualmente en los meses más fríos del año. Al igual que otras infecciones respiratorias se transmite por contacto con secreciones de personas infectadas a través de las gotitas que se diseminan al toser o estornudar y de superficies u objetos contaminados con estas secreciones.
Esta enfermedad se manifiesta con: Fiebre mayor a 38 ºC, tos, congestión nasal, dolor de garganta, de cabeza y muscular, y malestar generalizado. En los niños pueden presentarse también: problemas para respirar; vómitos o diarrea e irritabilidad o somnolencia.
Los síntomas suelen aparecer a las 48 horas de efectuado el contagio y la mayoría de los afectados se recuperan en una o dos semanas sin necesidad de recibir tratamiento médico. Sin embargo, en niños pequeños, personas mayores y con otras afecciones médicas crónicas, la infección puede conllevar graves complicaciones, provocar neumonía e incluso causar la muerte.
PARA EVITAR EL CONTAGIO ES IMPORTANTE:
-Lavarse frecuentemente las manos con agua y jabón.
-Al toser o estornudar, cubrirse la boca y nariz con un pañuelo descartable o con el ángulo interno del codo.
-Tirar a la basura los pañuelos descartables inmediatamente después de usarlos.
-Ventilar los ambientes y permitir la entrada de sol en casas y otros ambientes cerrados.
-Mantener limpios picaportes y objetos de uso común.
-No compartir cubiertos ni vasos.
-Enseñar a los niños a lavarse frecuentemente las manos.
-Vacunar anualmente a todas aquellas personas que pertenezcan a grupos de riesgo, población vulnerable de presentar complicaciones: bebés entre 6 y 24 meses (deben recibir dos dosis separadas por al menos 4 semanas, sino recibieron dos dosis anteriormente); embarazadas en cualquier momento de la gestación; puérperas hasta el egreso de la maternidad (si no se vacunaron durante el embarazo); personas mayores de 65 años; personal de salud; niños y adultos de 2 años a 64 años con enfermedades respiratorias, cardíacas, inmunodeficiencias congénitas o adquiridas, pacientes oncohematológicos y trasplantados, obesos con índice de masa corporal mayor a 40, diabéticos, y personas con insuficiencia renal crónica en diálisis; convivientes de enfermos oncohematológicos y convivientes de bebés prematuros menores de 1.500 g. entre otros.