Los trabajadores de Garbarino se hicieron sentir en las calles de Mar del Plata
Con el envío de telegramas de despido para los empleados de Compumundo, el conflicto en Garbarino ingresó en una etapa de incertidumbre total. El grupo que maneja ambas firmas decidió desmantelar de artículos de computación, cesanteando a unos 150 trabajadores, lo que puede ser un anticipo de lo que pase en la cadena de venta de electrodomésticos.
Luego de varios meses sin pagar los sueldos, la firma propiedad de Carlos Rosales no responde a los reclamos, y a esta altura parece muy difícil que haya una solución que permita la continuidad de la empresa. Por eso, los empleados piden al Gobierno que "se involucre más activamente", y que sea parte de un salvataje de los casi 4000 empleados.
"La situación sigue siendo la misma que el primer día, lamentablemente siguen los incumplimientos por parte de la empresa Garbarino y su titular el señor Carlos Rosales y se ha agravado la situación, porque han procedido a despedir algunos trabajadores de Compumundo, razón por la cual volvemos a la calle, para hacer visible el grado de irresponsabilidad de este señor que en todo el país ha abandonado a mas de 4000 trabajadores", manifestó Darío Zunda, secretario gremial del Sindicato de Empleados de Comercio, en declaraciones a El Marplatense.
Al ser consultado sobre si han tenido comunicación o respuestas, el referente sindical, sostuvo que "los mandos están cortados, en el caso de Compumundo, despidieron a todos y en el caso de Garbarino no hay referencias concretas de gente que tome decisiones, por lo cual el único responsable de toda esta situación es el propietario que no abre canales de comunicación y no hace propuestas de ningún tipo para inicialmente solucionar los mas de 400 mil pesos de deudas salariales que tiene con los empleados de Garbarino".
La empresa les adeuda parte de los sueldos de mayo, junio, julio, agosto y el aguinaldo, y todavía no tienen ninguna certeza de cobro. En la actualidad, la mayoría de las sucursales están cerradas, y la perspectiva es que se mantengan así por un tiempo.
En referencia a los empleados afectados en Mar del Plata, Zunda señaló que "son 35 entre las dos banderas, considerando los que están y los que han sido despedidos".
Intento de salvataje
A mediados del mes pasado, antes de comenzar a realizar los despidos, el grupo Grabarino intentó vender parte del paquete accionario de la cadena Compumundo, para buscar oxígeno financiero en medio de la tormenta.
Según se supo, sacó a subasta 58.650.000 en acciones, equivalentes a más de la mitad del capital social de la empresa, con el objetivo de recaudar más de 50 millones de pesos, a un valor nominal de 1 peso cada una, con derecho a un voto por acción. Pero no hubo ofertas, y la medida fracasó.
Si bien en el entorno de la firma aseguran que podrían buscar otra subasta, la decisión de comenzar a despedir personal hace pensar en una solución más drástica. Por eso, la empresa comenzó a achicar su plantilla a partir de este mes, mientras continúa cerrando locales.
Además, aseguran que cuentan con más de 45 sucursales que están prácticamente sin operar. Compumundo integra el grupo junto con otras cinco unidades de negocio: Garbarino (la cadena de electro insignia), Garbarino Viajes, la financiera Fiden y las plantas Tecnosur y Digital Fueguina, ubicadas en Río Segundo, en Tierra del Fuego.