El “Tornado” habló en su regreso a Mar del Plata luego de la derrota por puntos ante Josh Kelly y repasó en Marca Deportiva Radio (FM 99.9) las enseñanzas que le dejó su primera experiencia fuera del país. “Se vienen peleas más difíciles y me tengo que preparar”, adelantó.

Por Rodrigo Divito (@rodrigodivito)

Es momento de sacar conclusiones. El marplatense Lucas Bastida tuvo su primera pelea fuera del país y cayó por puntos ante Josh Kelly en la disputa del Cinturón Internacional OMB Super Welter. Pero ese combate en Newcastle fue mucho más que un resultado puntual: es el inicio de una nueva etapa para “El Tornado”.

Así lo reflejó en diálogo con Marca Deportiva Radio (FM 99.9) luego de arribar a la ciudad: “fue muy lindo, la gente allá nos trató muy bien, todo de primera. Estoy muy contento con la oportunidad pero molesto o amargado por la pelea porque no salió como yo quería. La pelea la perdí yo porque me bloqueé y no hice nada para impedir que gane, entré en su juego”, analizó.

Una de las principales enseñanzas que le dejó su 21° presentación en el campo rentado, fue que debe hacerle caso a rajatabla al rincón. Sobre todo si allí están los ex monarcas nacionales Fernando “Maravilla” Sosa y Carlos Olivera: “subí muy tranquilo, no estaba nervioso, pero me encontré con un Kelly que tenía una buena distancia con su izquierda, no la podía eludir, ciertos movimientos muy pequeños me sacaron de pelea y ahí le erré yo. En el rincón me decían que en vez de sacar las manos con potencia trabaje con más golpes y más ritmo. No tiré tanta cantidad de golpes y eso me jugó muy en contra, creo que ahí pierdo la pelea”.

Es consciente de lo que le faltó para llevarse la pelea en el Vertu Motors Arena: “no me jugó en contra el público, creo que me compliqué yo mismo, ni siquiera él me la ganó. Creía que tenía razón y la tenía el rincón, le tengo que pedir disculpas. Sé lo que tengo que trabajar para estar a nivel internacional pero nos faltó sacar más manos y más golpes”.

Hubo otra enseñanza que le dejó su paso por Inglaterra y es manejar el inglés para no tener inconvenientes cuando le toca pelear en el exterior: “en la conferencia de prensa me salvo la vida Federico Miranda, un amigo que viajó y que sabe muy bien el inglés, sino hubiera podido ni hablar. Me voy a poner a estudiar inglés ahora porque y está bueno saberlo para estas situaciones”, adelantó.

Las puertas comenzarán a abrirse porque, más allá de los errores que puntualizó, pudo competir y eso, cuando un argentino pelea afuera, es valorable: “no me gustó para nada esta derrota porque la perdí yo, le pedí la revancha y ahora me voy a preparar a fondo porque vienen peleas más difíciles”.

El regreso, luego de tantas sensaciones acumuladas, fue con un enorme recibimiento de la gente más cercana: “se me retrasó el vuelo, tuvimos que ir a Montevideo porque había niebla y cuando llegué acá, había una recepción de todos los chicos del colegio, del gimnasio, mis amgios del colegio, me sorprendieron mucho, con eso yo ya gané”, finalizó Bastida.