El siniestro se registró alrededor de las 5 y, pese a la fuerza del impacto, no dejó heridos de mayor gravedad, aunque el motociclista debió ser trasladado a una clínica privada para realizarse estudios de rigor.
El conductor del Fiat Siena color gris, circulaba por Castelli y no detuvo su marcha ante el semáforo en rojo. Según informaron fuentes oficiales, el control de alcoholemia realizado con posterioridad al choque arrojó un positivo de 1,56 g/l en sangre, tres veces más del límite permitido.
En cambio, tanto el motociclista como el conductor del auto rural que resultaron embestidos mientras circulaban por la avenida Independencia, dieron negativo en los testeos realizados por los agentes de Tránsito.