Marplatenses en el vuelo de Aerolíneas: "Nunca había vivido una experiencia así"
Por Camila Cadel
La madrugada del pasado martes, un vuelo de Aerolíneas Argentinas que provenía de Madrid, sufrió fuertes turbulencias por encima de océano, cerca de Brasil. Resultaron heridas 12 personas y 3 de los pasajeros se encontraban lastimados de gravedad por lo que fueron derivados al hospital de la zona, cuando llegaron a Ezeiza.
El vuelo AR 1133 de Aerolíneas Argentinas partió el pasado lunes a las 20.10 desde el Aeropuerto de Barajas de Madrid, y aterrizó en el Ministro Pistarini de Ezeiza casi una hora antes de su horario de llegada, a las 4:30 de Buenos Aires, según muestran los servicios de rastreo de vuelos online.
Susana, una marplatense que estaba a bordo de avión, viajaba junto a su esposo Jose Luis, volviendo de haberse tomado vacaciones y en diálogo con El Marplatense, expresó cómo vivieron la situación desde adentro.
"Veniamos en el vuelo, muy tranquilos, porque el comandante nos dijo que iba a serlo por las buenas condiciones del clima. Mas o menos a las 6 horas de haber salido, sorpresivamente tuvimos una turbulencia fuertísima. Mucha gente se golpeó, se lastimaron los que estaban parados. Habia muchos que estaban al fondo buscando agua o en el baño. Algunos estabamos con el cinturón desabrochado y nos golpeamos un poco pero no pasó a mayores", continuó.
"El problema fueron aquellos que no estaban en su asiento porque resultaron muy lastimados. Las azafatas pidieron por médicos en el avión y que por favor fueran a auxiliar. Nosotros estabamos en la fila 28 y ésto era después de la 30. Se notaba que la tripulación estaba muy nerviosa. Fue todo muy fuerte y sorpresivo pero duró pocos segundos. No estaban los carteles indicadores prendidos y tampoco habían dado un anuncio porque a todos nos llevó por sorpresa", dijo la marplatense.
"Nunca había vivido una experiencia así. Yo he viajado mucho en avión, a destinos con largos trayectos y jamás había pasado por algo como esto. Con mi esposo quisimos ponernos el cinturón y nos costaba por los nervios, pero por suerte pasó ese momento de tensión y el resto del vuelo fue tranquilo. Se podía ver que atrás era un caos. Por supuesto, después no dieron el servicio de desayuno. La gente lastimada estaba en el piso. El avión iba lleno. Pudieron auxiliar varios médicos que iban a bordo", agregó Susana.
"Cuando aterrizamos, pidieron que nos quedemos sentados. Luego subió la gente de Migraciones y los médicos para atender a éstos pasajeros. Recién cuando nos dijeron que podíamos empezar a bajar, lo hicimos y ahí nos enteramos un poco más, porque no nos habían informado mucho. Supimos la cantidad de heridos, una chica de 26 años, de Río Negro, se fracturó el coxis. Un hombre se golpeó la cabeza y la señora que estaba sentada adelante nuestro también, entonces por eso salió la máscara y no la pudieron volver a guardar", concluyó la marplatense que iba a bordo del vuelvo.