Mundial de Rugby: los Pumas superaron a Tonga y mantienen viva la esperanza
El triunfo final de los Los Pumas por 28-12 frente a Tonga no despeja las dudas que había dejado el equipo en la derrota ante Francia. Ante un rival débil y luego de haber sacado una ventaja que le permitía vislumbrar una mejoría, volvió a desconcentrarse y llega al partido con Inglaterra sin ningún argumento que le permita ilusionarse con vencer a la Rosa.
Aunque la caída en el debut los dejó con un pie afuera del Mundial de Rugby de Japón 2019 y la actuación ante Tonga no fue sólida, la selección albiceleste aún tiene chances matemáticas de clasificar a la próxima etapa.
Este fue el primer triunfo argentino en 11 partidos, que cortó la peor racha de derrotas consecutivas en la historia de los Pumas en partidos oficiales. Aunque muy lejos del objetivo de jugar bien para recuperar la confianza.
Julián Montoya anotó tres tries y Santiago Carreras el restante, todos en el primer tiempo, y fueron dos de los puntos salientes en una actuación general muy opaca. El próximo sábado, están obligados a vencer en Tokio a Inglaterra, uno de los favoritos a levantar la Copa Webb Ellis, para seguir con chances de pasar a cuartos de final, aunque a merced de otros resultados.
Los Pumas tuvieron un arranque sólido. A partir de la presión que ejercieron con el tackle, y forzaron pérdidas y penales. Así, a los 25 minutos ya ganaban 28-0 y parecían encaminarse cómodamente al objetivo que se habían planteado: ganar, primero; jugar bien y sumar confianza de cara al partido con Inglaterra, segundo, y conseguir el punto bonus para tener más posibilidades de clasificarse a cuartos de final en caso de ganar ese trascendental duelo. Sólo consiguieron dos de esos tres.
Todos los tries del primer tiempo llegaron a través de la misma vía: tackle agresivo y pelota recuperada. El primero, a los 6 minutos, fue tras un penal y una jugada de line-out en la que Montoya quedó solo por el lado ciego. El segundo, a los 18, parecido: penal, line-out, maul y try del hooker; el tercero, tras la salida, Carreras recuperó una pelota suelta en mitad de cancha y se escapó hasta el otro in-goal, y el cuarto, a los 25, una gran embestida otra vez de Montoya tras un scrum-5.
Unos 5000 le pusieron fervor a la cálida (y muy húmeda) tarde en el coqueto Hanazono Rugby Stadium de esta ciudad, que estuvo poblado por 21.900 espectadores. El aliento se hizo sentir en el comienzo, pero se fue diluyendo a la par del juego de los Pumas. Así y todo, despidieron al equipo con una tibia ovación.
Tonga encontró el descuento después de que taparan un despeje a Urdapilleta. Tras un par de fases, Telusa Veainu se filtró entre el 10 y Moroni. El tackle, que en el inicio había sido el arma más letal, flaqueó luego. Ocurrió lo mismo con el segundo try del fullback, a los 25 del segundo tiempo, cuando Boffelli falló cerca del propio in-goal. El que le birló el punto bonus, que a esta altura ya wa una anécdota.
La salida del fondo con el pie fue otro de los puntos débiles del equipo argentino. Además de eso, y más allá de la amplitud del resultado, sigue preocupando la falta de conexión entre los backs. Pelotas al piso, pases atrás del receptor, knock-ons. no faltó nada. Apenas cuatro quiebres en todo el partido, tres de ellos de Carreras.
La disciplina y las formaciones fijas volvieron a ser dos aspectos positivos, pero que no alcanzan para forjar una base a la cual construir. La defensa podría ser un piedra, pero sigue faltando mucho para que termine de ser sólida. Se viene Inglaterra y no aparecen argumentos que permitan estar a la altura. Una vez más, todo queda reducido a una actuación épica.
Fuentes: La Nación