Sexo en cuarentena: encontrar deseo entre la imposición
El aislamiento obligatorio trajo modificaciones en casi todos los aspectos de la vida de los marplatenses, entre ellos la sexualidad. La convivencia extendida a 24 horas todos los días, las relaciones a distancia y la soledad son aristas que una persona atraviesa en el marco de la pandemia.
Mientras nos cuidamos entre todos para que no se propague la enfermedad y prevalezca la salud, ¿qué pasa adentro de casa?. Cecilia Cardarelli, licenciada en psicología (matrícula 45799) y sexóloga dialogó con El Marplatense sobre estos cambios de hábitos y brindó recomendaciones acerca de cómo encarar estos días.
"Debemos entender que esta cuarentena es algo impuesto, no es algo que elegimos. Acá no hablamos de deseo, si no de imposición. Una cosa es entrar en cuarentena y ser una pareja sola, otra son familias, otra es una familia con una casa confortable y otras en espacios reducidos", inició Cardarelli.
Existe "en el imaginario popular" la idea de "encerrarnos y tener sexo sin parar". En ese caso, uno lo planifica (con mayor o menor tiempo) y decide hacerlo, ahora es algo impuesto. "Es probable que la vida sexual se vea afectada por esta situación, lo que uno fantasea, en la realidad de ahora no se podrá llevar a cabo", añadió la licenciada.
"La sexualidad en algún punto va a quedar en segundo plano. Me han comentado de unos primeros días mucha actividad sexual en pareja que están solas, pero después se cae. El deseo se nutre del hambre, y ahora uno está todo el tiempo con una persona. Ni hablar si estás mal, te peleaste por algo. La sexualidad hay que verla en un plano delimitado por este encierro impuesto. Esto afectará negativamente en algunos casos", aseveró.
El "sexting" en las relaciones a distancia
Según explicó la licenciada, cuando las personas se encuentran bien en la pareja, tienen buena conexión y hay un diálogo abierto en la sexualidad, puede abrirse el paso al sexo a través de la tecnología, con chats, fotos y videollamadas.
Distinto sería el caso de parejas que no hablan nunca de su relación. "Por ahí no se preguntan cómo andan, si están bien, si les gusta como están llevando la vida sexual. Esas parejas que tienen escasez de diálogo, probablemente estando a la distancia lo mantengan", detalló.
"Si se animan, a partir de la distancia, la tecnología nos permite comunicarnos a partir de videollamadas, quienes se animan pueden llegar a hacer algún video o comunicación con imagen que pueda elevar el erotismo. Así pueden satisfacerse cada uno en su casa pero compartiendo el momento. El sexting, está totalmente habilitado y es un buen recurso para las parejas distanciadas físicamente", apuntó Cardarelli.
"Cuando estás todo el tiempo con la persona, el deseo no se moviliza"
Las dificultades con las que pueden encontrarse las parejas, es que "la sexualidad y el deseo sexual se activa en tanto y en cuanto haya hambre de algo que no está satisfecho. Cuando tenes todo el tiempo esa persona con la cual podes tener relaciones encima, el deseo no se moviliza, porque está sofocado".
"Por eso está bueno que haya distancia, dormir en camas separadas, que se tomen tiempo para otras formas, como hacer masaje. También hay que pensar que todo esto se da con muchas familias, que hay más de dos y cuesta encontrar esos momentos para armar un encuentro sexualmente copado. Si no va a ser difícil, cuesta llevar el timing del deseo en pareja", se explayó la sexóloga.
El "aislamiento social para tener relaciones" que uno podría imaginar "en encerrarse tres días en un hotel de Cariló" no estaría sucediendo. Ahora "te encerraste diez días por obligación y, en principio, modifica totalmente el escenario de vida y, por ende, el sexual".
"Hay que tener claro que hay que mantener una convivencia cordial, que podamos respetarnos y hacer acuerdos. En cualquier vínculo, alguien se enoja con otra y se va a dar una vuela. Hoy no se puede. Es todo tan acotado que hay que revisar nuestro modo de vida nuevamente", concluyó la especialista.