Temor de una nueva guerra: Azerbaiyán lanzó una operación militar contra armenios en una región en disputa
La tensión se elevó al máximo y hay temor por una nueva guerra en el Cáucaso. Azerbaiyán lanzó hoy una operación militar en Nagorno Karabaj, tres años después del conflicto anterior, y pidió la retirada “total e incondicional” de su rival armenio de este enclave montañoso del Cáucaso.
La decisión militar de Azerbaiyán será tratada este jueves en una sesión especial del Consejo de Seguridad de la ONU. Hasta el momento, según las estadísticas de cada uno de los bandos, murieron 25 armenios y 9 azeríes, de los cuales dos eran civiles y siete policías.
El Ministerio de Defensa de Azerbaiyán anunció el comienzo de los operativos esta mañana, que describió como una “operación antiterrorista” como respuesta a la explosión de minas en la zona Nagorno Karabaj donde se ubican los peacekeepers de Rusia. Denunciaron que esas minas fueron colocadas de forma ilegal por la noche.
En un comunicado, Azerbaiyán dijo que lanzó la operación para desalojar a soldados de Armenia que desde hace tiempo afirma están desplegados dentro de la disputada región del Cáucaso, una acusación que Armenia niega. Esta exigencia del gobierno azerbaiyano es en respuesta al pedido de las autoridades regionales del enclave en disputa, autodenominado como República de Arsaj, de un alto el fuego inmediato y la apertura de negociaciones.
Los combates tienen lugar “en toda la línea del frente” y el ejército azerbaiyano ataca con “disparos de artillería y misiles, drones ofensivos y aviones de combate”, informó el ejército del enclave separatista, según reportó la agencia AFP. El ejército de Azerbaiyán aseguró que ya tomó más de 60 posiciones armenias en su ofensiva en Nagorno Karabaj.
Respuesta y denuncia de Armenia
Armenia denunció que Azerbaiyán comenzó a atacar zonas con infraestructura civil, como por ejemplo en la ciudad de Stepanakert.
La diplomacia armenia aseguró que se trata de una “agresión a gran escala” con fines de “limpieza étnica”. También juzgó que Rusia, garante de un alto el fuego pactado en 2020 con fuerzas de paz en el terreno, debería “detener la agresión azerbaiyana”.
Desde Ereván vienen exigiendo hace meses que Azerbaiyán levante el bloqueo al llamado Corredor del Lachín, por el cual ingresa gran parte de los insumos médicos y básicos para la población armenia que vive dentro de Nagorno Karabaj.
El primer ministro armenio, Nikol Pashinian, también pidió a Moscú, su aliado tradicional, y a la ONU que actúen. El gobierno armenio asegura que no tiene tropas en Nagorno Karabaj y dio a entender que las fuerzas separatistas estaban solas contra el ejército azerbaiyano.
La diplomacia azerbaiyana advirtió que “la única forma de lograr la paz y la estabilidad” es “la retirada incondicional y total de las fuerzas armadas armenias” del territorio y “la disolución del llamado régimen separatista”.
Un territorio con años de disputa
Desde hace meses que la tensión va en aumento en Nagorno Karabaj, un enclave secesionista en Azerbaiyán de mayoría armenia, que ya estuvo tres guerras en el último siglo.
La primera en 1918 y 1920, que quedó sofocada por la incorporación a la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS) de ambas naciones. La segunda sobre el epílogo de la URSS, entre 1988 y 1994, donde los combates acumularon más de 30.000 muertos y terminó con la victoria de Armenia, plasmada en el Protocolo de Biskek.
Y la tercera, donde el conflicto armado, entre septiembre y octubre de 2020, se saldó en favor de Azerbaiyán, con unos 3.000 muertos, que dejó un estado de conflicto latente, que acaba de hacer eclosión.
Azerbaiyán dijo que había informado de sus operaciones en el enclave a los garantes del acuerdo con que se cerraron los combates de 2020, Rusia y Turquía.
El Kremlin, que está más concentrado en su propia guerra con Ucrania, expresó su “preocupación”, dijo el portavoz Dmitri Peskov, asegurando que están tratando de convencer a Armenia y Azerbaiyán de que regresen “a la mesa de negociaciones”.
Turquía, un enemigo histórico de Armenia y principal aliado de Azerbaiyán, aseguró, a través de su Ministerio de Relaciones Exteriores, que la ofensiva azerbaiyana está “justificada”.
En medio de los llamados globales a retomar las negociaciones, a pedido de Francia, el Consejo de Seguridad de la ONU anunció que sesionará el jueves para analizar la situación en Nagorno Karabaj, según informó la agencia Sputnik, citando a fuentes de las Naciones Unidas.
Con información de Télam.