Uso responsable de tecnología en niños
Los especialistas destacan la importancia de moderar el uso pero no prohibirlo.
La especialista en educación Lola Cortés afirmó que 7 de cada 10 chicos buscan contenidos no apropiados en internet. Y que la generación del momento, conocida como Z (aquellos nacidos entre 1994 y 2010) presentan características particulares: “se comunican con imágenes, pueden interactuar con cinco pantallas a la vez, crean contenido y son autodidactas”.
“Además, el 76% desean que su vida laboral esté relacionada con sus pasiones y no quieren tener jefes. Son impacientes y muchos de ellos irreverentes” agrega Cortés.
Uso moderado de los dispositivos
La psicóloga integral Julia Borbolla por su parte, agregó que “no queremos un niño en las redes todo el día, necesitamos buscar alternativas sociales en el deporte, juegos de mesa, que estén por fuera del mundo digital”.
Mientras que el doctor Alberto González Astiazarán, afirmó que “la tecnología es una herramienta, una forma de obtener contenidos y de interactuar que nos lleva a solucionar problemas y entrenar las habilidades cognitivas si la sabemos usar correctamente”.
¿Cuánto tiempo estar frente a las pantallas?
De acuerdo con la American Academy of pediatrics los niños menores a dos años no deberían utilizarlas y con respecto al resto anuncia los siguientes períodos:
- De 2 a 5 años: de 30 a 60 minutos diarios.
- De 5 a 12 años: 60 minutos diarios acompañados por un adulto responsable.
- De 12 a 15 años: 90 minutos con supervisión del uso de redes sociales.
- Más de 16 años: 120 minutos, con conocimiento del uso de las redes sociales.
Evitar la ludopatía
La adicción a los videojuegos es una problemática que se encuadra dentro de la ludopatía: “entre otras consecuencias se destacan los dolores posturales, en las muñecas, trastornos del dormir, aumento de peso y ansiedad” afirmó Astiazarán.
Consejos para el manejo de medios digitales
- Establecer momentos compartidos libres de pantallas.
- Evitar pantallas con emisión de luz azul antes de dormir.
- Consignar con los hijos, compartir tiempo con ellos.
- Aprender a jugar con ellos en vez de prohibirles.