Volvió el clásico: el color de un día para la historia
El clásico transcurrió en paz y Mar del Plata demostró que se pueden organizar partidos de esta magnitud sin tener mayores inconvenientes. Te mostramos en fotos de Florencia Arroyos, el color de la tarde en el Minella.
No era un día más para el fútbol de Mar del Plata. Si bien la tensión y la atención estaba situada en el campo de juego, había todo un grupo de personas entre ellos dirigentes y organismos de seguridad, velando porque todo se viviera con cierta normalidad en la ciudad.
Así fue, no hubo que lamentar ningún tipo de hecho de violencia grave y tanto la parcialidad de Aldosivi que concurrió al estadio como anfitrión, como la de Alvarado que se reunió en la Villa Deportiva del Club a mirarlo en pantalla gigante; pudo disfrutar de vivir un clásico después de casi tres décadas.
Cada uno además, a la localía le aporta su estilo porque el conjunto del puerto eligió el regreso del famoso “Tiburón” que estuvo delante de la Tribuna Popular Sur y además, hubo humo verde y amarillo en el ingreso al campo. Seguramente, en la vuelta, la gente del “Torito" le aportará su propio toque.
Un operativo de seguridad montado específicamente para el control de la caravana de hinchas que iban al Minella pudo transcurrir con tranquilidad y fue porque todos colaboraron para no opacar la fiesta. Esa era la principal premisa y la ciudad pudo demostrar que se pueden organizar este tipo de eventos deportivos sin ningún tipo de problemas.
Fue una fiesta, todo salió según lo planificado y el protagonista real fue el fútbol porque además, el partido tuvo sus emociones más allá del 0-0. Mar del Plata está lista para que el clásico se siga jugando y las imágenes hablan por si solas.
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