Cámaras pesqueras denuncian “trabas burocráticas” al renovar los buques
Después del informe presentado por la Cámara de la Industria Naval de Mar del Plata, en el que se refleja que la antigüedad promedio de la flota marplatense es de 36,6 años, con algunos segmentos que superan los 50, las Cámaras pesqueras denunciaron que se encuentran con “trabas burocráticas” cuando deciden renovar sus buques.
“Al margen de la crisis y de la falta de créditos, la principal causa por la cual la flota no se renueva es porque el propio Estado pone obstáculos como por ejemplo limitar el alcance del permiso de pesca original restringiéndolos o extendiendo indefinidamente la duración de dichos trámites hasta que el armador desiste de los mismos”, denunciaron a través de un comunicado.
En este marco, la Cámara de Armadores de Buques Pesqueros y la Unión de Intereses Pesqueros Argentinos se reunieron especialmente para manifestar su preocupación.
“Mientras los barcos se siguen envejeciendo navegando, mientras otros van quedando paralizados en el muelle y reciben presiones para salir a pescar y no generar más desempleo, algunos armadores llevan meses o años tratando que les aprueben sus expedientes de reemplazo”, aseguraron.
Asimismo, en relación con los astilleros, ratificaron que la última botadura en el país de un barco pesquero nuevo fue en abril de 2016. “Desde esa fecha los astilleros argentinos están paralizados, mientras en el extranjero se construyen barcos para el Estado y otros armadores locales”, aseveraron.
