“Según Roxi, La obrita de teatro” llegará este viernes 18 de agosto a Mar del Plata, para presentarse a las 21:30 en el Teatro Roxy. Protagonizada por Julieta Otero, Ana Garibaldi, Mara Bestelli, María Marull, Juan Martín Zubiri, Dario Levy, Emiliano Ré y Lautaro Metral, retrata situaciones vividas a partir de que un grupo de padres quedan expuestos y enfrentados a partir de una actividad que era, en principio, dirigida a sus hijos.
“Lo que pasa en el escenario y en el público se llama puramente diversión”, comenta a El Marplatense, Julieta Otero, quien escribió la obra junto a Azul Lombardía.
“Un grupo de padres de un jardín de infantes tiene que preparar la obra de teatro de fin de año para sus hijos. En el transcurso de los preparativos y ensayos para ´la obrita´, mamis y papis empiezan a enfrentarse unos con otros quedando totalmente expuestos y desbordados. Al borde del colapso nervioso, cada uno de ellos se encuentra con quienes son hoy y quienes quisieron ser en esta vida, revelando sus frustraciones más profundas”, describe.
“Es una comedia desopilante para reírse de las contradicciones humanas. Roxi es una madre urbana, una mujer fuerte que se transformó en un ser vulnerable e inseguro luego del nacimiento de su hija.
Después del fenómeno de la serie web (YouTube, 2012) y de la explosión del personaje ficcionado en las redes sociales en las que Roxi interactúa con fans en más de sesenta países, Julieta Otero, Azul Lombardía y Lucas Mirvois (sus creadores) decidieron expandir el universo de Roxi con la edición del primer libro, Autobiografía de una madre incorrecta (Grijalbo, 2013), donde el personaje narra su vida en primera persona: la adaptación de la serie para televisión (Lifetime, Netflix, TV Pública Argentina), y Según Roxi, la obrita de teatro. Actualmente están presentando su segundo libro “Cómo ser la peor mamá del mundo” que propone la falla como camino a la excelencia.
-¿El tema es un disparador que genera un debate posterior, verdad?
Si se arma debate después en cada familia o grupo de amigos que van a verlo, nosotros no nos enteramos. Y tampoco lo estimulamos en las redes sociales porque nos parece que el debate virtual puede generar situaciones agresivas con lo que se viene sucediendo.
Por lo pronto, la gente sale con dolor de cara de tanto reírse. Gana fuertemente la comedia y yo creo que cada uno se va a su casa pensando cuales son las cosas que dice que hace por sus hijos, y que en el fondo son deseos o frustraciones personales llevadas a escena con la excusa de la maternidad o la paternidad. Esa es la pregunta que nos llevamos cada uno.