Intensifican la búsqueda por el bebé robado en el cementerio
La Justicia intensificará este martes las labores investigativas y el rastrillaje que se dispone para hallar el cuerpo del bebé de año y medio que fue robado del cementerio de Otamendi, según denunciaron sus padres en los últimos días.
"Estamos realmente con un despliegue de personal policial en todo el partido. Se han dispuesto rastrillajes desde el primer momento en zonas aledañas al cementerio", ratificó en una primera instancia a El Marplatense Ana Caro, la fiscal que lleva adelante el caso.
La funcionaria judicial indicó que durante el lunes se logró rastrillar una "amplia región del partido", tanto por la vía terrestre como a través del recorrido de arroyos, sumado al apoyo aéreo de drones para lograr tener una mejor perspectiva".
La fiscal dijo que en las próximas horas se sumará a las labores de búsqueda, que incluirán el relevamiento de distintas viviendas aledañas, personal de Caballería para hacer un "mejor barrido" de la zona, además de agentes de la división canina de policía proveniente de Tandil.
Asimismo, Caro afirmó que ya se han tomado "todas las declaraciones que había que tomar", aunque aclaró que, en caso de surgir algún nuevo elemento de la investigación, podría llegar pedir una "ampliación" de los testimonios o requerir otra medida, si es que hay sospecha de un "ilícito". "Hasta el momento no hay elementos que nos permitan determinar que existió algún otro tipo de delito", ratificó.
En este sentido, la fiscal recordó que el robo de un cádaver no está contemplado dentro del Código Penal, por lo que sólo se constituye una "contravención". "Lo que se pena o sanciona es el robo de cadáver cuando hay una extorsión o pedido de dinero por el cuerpo", explicó.
Sin embargo, la agente judicial dijo que se abrió una investigación caratulada por el delito de "averiguación de ilícito" que tiene como fin "saber si de esta búsqueda que se está haciendo surge la comisión de algún otro tipo de delito conexo".
Al recordar el reciente antecedente que tuvo lugar en marzo pasado, por la profanación del cadáver de otro bebé, Ana Caro cuestionó las medidas de seguridad de las que dispone el cementerio de Otamendi.
"Existe un problema porque no está en el ejido urbano y no está totalmente perimetrado el cementerio ni tiene guardia todo el día. No es que las personas que ingresan lo hacen por un solo lugar, sino que lo pueden hacer por cualquier parte", graficó, sobre las falencias.