Se entregó Lula Da Silva y será trasladado a la cárcel de Curitiba
El ex presidente de Brasil, Lula Da Silva, se entregó este sábado a la policía luego de ser sentenciado a 12 años y un mes de prisión por corrupción pasiva y lavado de dinero. El dirigente político es trasladado en una camioneta al aeropuerto, dónde lo llevarán a la cárcel de Curitiba.
La salida de Lula se dio en un marco de tensión, con gritos y empujones entre los miles de manifestantes que lo esperaban en las afueras del Sindicato de Metalúrgicos en San Pablo, y que horas antes habían impedido su egreso.
El líder del Partido de los Trabajadores caminó varios metros entre la multitud, hasta que accedió a los móviles policiales. Fue minutos antes de que se cumpliera el último plazo de 30 minutos que otorgó la Justicia para entregarse.
El juez brasileño Sérgio Moro le había otorgado tiempo al ex mandatario hasta las 17 de este viernes para presentarse en Tribunales. Sin embargo, Lula aguardó en un sindicato de la localidad de San Pablo, con una masa de gente que lo apoyaba en las afueras, hasta la tarde de este sábado.
Esta detención se logra tras la decisión de la Corte Suprema brasileña, que rechazó este miércoles en un fallo dividido el hábeas corpus interpuesto por Lula. La encargada de desempatar la reñida votación, que terminó en 6-5 contra el exmandatario, fue la presidenta de la Corte, Cármen Lúcia.
La defensa del ex presidente brasileño presentó esta madrugada un pedido de habeas corpus para intentar una última chance de que el líder opositor no sea detenido. El argumento para este reclamo era que el pedido de prisión fue emitido sin que la cámara de apelaciones de Porto Alegre cumpliera con los pasos del proceso. Sin embargo, fue rechazado por el Supremo Tribunal de Justicia.
