El acuerdo con el FMI exige un recorte adicional de $200.000 millones
La Casa Rosada aplicará un recorte fiscal adicional al previsto del orden de los 200.000 millones de pesos. Se trata de unos 8.000 millones de dólares que Mauricio Macri deberá podar del Presupuesto bianual ( 2018-2019) para cerrar el acuerdo con el FMI.
La cifra surge de las nuevas metas fiscales que reclaman los técnicos del Fondo Monetario: serían de un desequilibrio para este año del 2,5 % del PBI y para el próximo, del 1,5 %. Ambas metas son un poco más exigentes que las que pretende negociar la Casa Rosada.
Alejandro Werner, del FMI, exige bajar el rojo en forma acelerada para darle credibilidad internacional a la Argentina. Pero implica un importante recorte y muchos conflictos: sin escalas y sin gradualismo reduce a la mitad el déficit de la Tesorería.
Se pasaría de un déficit actual del 3,2 % a otro del 1,5 %. El pacto que se negocia también generará otro cambio importante. La Casa Rosada deberá abandonar las -hasta ahora- ineficaces metas de inflación: el acuerdo las pulverizará. El FMI exige cambiar ese esquema antiinflacionario, que fue eje de un relato económico oficial que nunca se cumplió. Ricardo Cardarelli propone reemplazarlas por ortodoxas metas de expansión monetaria.