Médicos y enfermeros hicieron un "chaquetazo" contra del aborto
A diez días de que el Senado vote el proyecto de legalización del aborto, médicos y enfermeros hicieron un “chaquetazo” para manifestarse en contra del aborto. La convocatoria fue este domingo a las 12 y el encuentro duró menos de una hora.
Unos 80 profesionales de la salud, acompañados por algunos familiares, posaron frente al Congreso con pañuelos celestes, delantales blancos y carteles en rechazo a la Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE), que ya cuenta con media sanción en Diputados. “Legal o ilegal, el aborto mata igual”, decía una de las pancartas.
Durante el acto, leyeron el juramento hipocrático y los médicos presentes volvieron a comprometerse a respetarlo. Hubo aplausos frente a uno de los puntos: “Tener absoluto respeto de la vida humana desde la concepción”. En el medio, algunos automovilistas que cruzaban Entre Ríos tocaron bocina y gritaron a favor y en contra del proyecto.
“Dicen que no tiene vida, dicen que no tiene voz, acá están los que marchamos, por la vida de los dos”, cantaron los que se sumaron al chaquetazo. Muchos llevaban banderas argentinas, que levantaron junto a los pañuelos al entonar el himno.
Casi 50 mil mujeres son internadas cada año por complicaciones en abortos, según datos oficiales. Consultados por este tema, los médicos presentes dijeron que “hay que contener a la embarazada para que no recurra al aborto”. “Sabemos que hay mujeres que se mueren por abortos clandestinos. Tenemos que evitar la clandestinidad apoyando a la mujer para que no decida abortar”, dijo el cirujano Luis Durand.
¿Y qué pasa con la mujer que toma la decisión de abortar igual? “Hay que convencerla para que no lo haga, legalizar el aborto es legalizar el asesinato”, afirmó el médico urólogo Alejandro Nolazco. Ninguno quiso mostrarse contrario a las dichos del pediatra Abel Albino que abrieron una fuerte polémica el miércoles pasado, cuando expuso ante el Senado y sostuvo que el preservativo no sirve para prevenir el VIH.
Luis Flores Sienra, especialista en Clínica Médica, Pulmón y Terapia Intensiva, y Antonio Catalan Pellet, médico del Comité de Bioética del Hospital Rivadavia, posaron con un feto de silicona de unos 4 centímetros, e insistieron en que la vida empieza al momento de la concepción. Además, pidieron por la objeción de conciencia individual e institucional (en el la primera está prevista en el proyecto que tiene media sanción, la segunda está prohibida). “No podemos ir en contra de nuestros principios”, agregaron, según detalló Clarín.